Santiago González

CARTA DEL DIRECTOR

Santiago González

Director de El Día de Valladolid


Un relevo ordenado para un cambio de rumbo

04/06/2023

Haciendo la digestión aún de los resultados electorales del pasado domingo, ya con los nervios y la tensión más templada, los candidatos municipales van afrontando el cambio de rumbo que la ciudad va a acometer en los próximos años. El empate técnico entre las dos grandes fuerzas políticas, PSOE y PP, ha provocado que los socios de cada uno hayan decidido hacia qué lado se inclinaba la balanza. Y ahí Vox se ha llevado el gato al agua triplicando sus concejales, mientras que Valladolid Toma la Palabra ha empeorado sus resultados anteriores y no le permite sumar con los de Óscar Puente para seguir en el gobierno municipal. Aunque aún falta concretar el acuerdo, nadie duda de que Jesús Julio Carnero será el próximo alcalde vallisoletano con los votos de los de Abascal tras la constitución del Ayuntamiento el próximo 17 de junio.
Las razones de estos resultados se han analizado por parte de los protagonistas y de todos los expertos y tertulianos durante esta semana. Sin querer ahondar mucho más, simplemente me gustaría ofrecer algunas claves, que para mi han sido decisivas. La principal es que la política nacional influye mucho en los ciudadanos a la hora de meter el voto en la urna y, en este caso, la marea que ha teñido de azul el mapa nacional ha impulsado a la candidatura de Carnero y le ha dejado a unos 700 votos de superar a la socialista; por el contrario la errática gestión de Pedro Sánchez y su nefasta política de pactos con independentistas y populistas le ha pasado factura a Puente, que a pesar de ello se ha quedado a poco más de 300 votos de obtener un concejal más y lograr que el bloque de izquierdas siguiera al frente de la Corporación. Casi lo mismo le ha sucedido a la coalición que encabezaba María Sánchez, la radicalización de Podemos y la esperpéntica gestión de las ministras Montero y Belarra ha hecho mella en la coalición, a pesar de que durante los mandatos anteriores demostraron que no siguen el ejemplo de sus dirigentes nacionales.
Por supuesto que ha habido factores locales en los resultados electorales. El soterramiento ha ocupado gran parte de los debates durante la campaña y ha podido influir, lo mismo que los casi 3.000 votos de Contigo Avanzamos, pero no creo que haya sido decisivo, más allá de que en un final tan ajustado todo suma o resta votos. Sin embargo, los barrios del este, situados al otro lado de la vía, siguen votando mayoritariamente al PSOE. Por otro lado, la movilidad (carriles bici, zona de bajas emisiones, etc) tiene cabreado a una parte del vecindario y eso quizás haya tenido alguna influencia más a la hora de que la lista encabezada por Puente no haya alcanzado esos 12 o 13 concejales que presumía que podría conseguir. Creo que alcalde en funciones y su equipo no han sabido transmitir las razones y ventajas de esta transición hacia un nuevo modelo de ciudad o quizás quisieron implantarlo de manera demasiado rápida y sin el diálogo y consenso necesarios. 
En definitiva, a falta de la negociación entre PP y Vox, Carnero asumirá las riendas del Ayuntamiento en las próximas semanas y Puente se ha comprometido a llevar a cabo un relevo tranquilo y ordenado para que los grandes proyectos de la ciudad continúen su cauce. Lo cierto es que el modelo de ciudad de ambos comparte más cosas de las que se imaginan, aunque por supuesto hay diferencias relevantes. El soterramiento puede ser lo que más les distancie, pero no porque ambos no crean que es la mejor opción, sino porque el socialista considera que es inviable económicamente y el popular mantiene su viabilidad. Lo importante es que los ciudadanos sintamos que la alternancia democrática es un valor, que nada se rompe por la llegada de nuevos dirigentes al Ayuntamiento, que los cambios de rumbo se hacen con suavidad y sin romper con el pasado. Construir sobre lo ya hecho y no destruir para empezar de nuevo, esa debe ser la filosofía de los políticos, sean del color que sean, y en esta ocasión parece que la buena relación personal que mantienen Óscar Puente y Jesús Julio Carnero se va a trasladar a la Corporación Municipal y se producirá una transición con "pulcritud democrática", sin aspavientos y como realmente quieren los ciudadanos. El primer ejemplo ha sido la no aprobación de la Ciudad Deportiva del Real Valladolid para dejar las manos libres al PP en sus planes sobre el estadio de fútbol. Seguro que este comportamiento, que debería ser normal pero no lo es casi nunca, sirve para poner los cimientos de un mandato basado en el diálogo que pueda servir para el progreso de la ciudad y la mejora de la calidad de vida de los vecinos.