¿Una chirigota en Valladolid?

Javier M. Faya
-

La ciudad se prepara para los Carnavales con disfraces, batucadas y el deseo de una vecina de la asociación Santos Pilarica de 'importar' el espíritu de Cádiz y del Teatro Falla

Foto de archivo de un pasacalles. - Foto: J. Tajes

«Buenas tardes, comenzamos a preparar el Carnaval 2024. Junto con el resto de entidades pretendemos crear y cantar una chirigota, es por ello que buscamos: voluntarios y/o personas que se animen a escribir una con música de canción conocida. Voluntarios y personas que se animen a cantar. El tema será: 'El cambio climático y cómo nos afecta'. Toda aquella persona, grupo, etc. que quiera participar en La Chirigota o en la propia organización del carnaval nos puede contactar a través de cualquier medio». 

Así reza el anuncio que ha colgado la asociación vecinal Santos Pilarica en Facebook. Silvia Peláez, vicepresidenta de la misma, es el 'alma mater' de esta iniciativa, aunque no se cansa de resaltar que está implicado su barrio, pero también Belén, Pilarica, Ampa Antonio Machado, Cáritas, JOCE...

De momento solo ha acudido a la llamada un vecino que se presta a colaborar con su guitarra, «aunque ahora tiene mucho lío». Vamos, que la cosa pinta mal por mucho que tenga en su cabeza los trajes y la melodía de la canción. «Espero sacar tiempo para la letra», confiesa esta enamorada de los Carnavales de Cádiz, que lo tuvo claro cuando vio actuar a Las Spice del Padrón hace dos veranos. 

Les faltan cuatro personas para que su sueño se haga realidad y la situación es crítica. ¿Ysi reclutan niños? «En principio cantan adultos, pero ellos se podrían aprender la canción (los 'tacos' de Cádiz no tienen cabida, claro), lo que es un poco dificil ya que vamos con el tiempo un poco justo». Apurarán hasta la víspera de que arranquen las fiestas, esto es, el próximo viernes, finalizando el martes 13 con el Entierro de la Sardina.

Lo cierto es que es una  pena que en la capital pucelana no haya una tradición chirigotera como en Arroyo de la Encomienda, donde llevan celebrando 25 ediciones del concurso a un altísimo nivel. El sábado 10, a las 19.30 horas, la diversión está asegurada en la nueva Casa de la Música. 

Obviamente, no hay un genio de este arte del siglo XVI como el Selu, el Yuyu, el Lobe o El Canijo de Utrera, pero los milagros existen y la constancia a veces da sus frutos. 

Ysi no que se lo pregunten a David Herrero, mestre -o maestro- de la asociación Sambulé Batucada, que se encuentra en Brasil, concretamente en Pelourinho, Salvador de Bahía, aprendiendo movimientos. Vuelve el 8 de febrero y sus 70 'pupilos', comenzando por la presidenta, Carol Muras, aguardan ansiosos su regreso. Irán todos disfrazados de Cybergoth, una tendencia procedente de la subcultura gótica del Londres punk de los años 80 con influencia veneciana. «Todo esto me aporta una desconexión del mundo enorme, la música, las vibraciones de cada golpe, los bailes y el buen rollo que tenemos hace que me sienta feliz», sostiene la 'jefa'.  

Hay cinco asociaciones más -La Torcida, Tudo Ben percusión, Bloco Feroz, Batucados y Cónclave-;todas ponen colorido a los desfiles. El domingo 11 es el día grande en la Plaza Mayor con un centenar de 'batuqueros'. 

Mientras, el Ayuntamiento guarda un escrupuloso silencio pues el programa será presentado la semana que viene, aunque no faltarán los bailes de salón, los carruseles infantiles, los titiriteros... Ylos concursos de disfraces, que cada vez se compran menos en las tiendas tradicionales. Como aseguran en La tienda de Carmen, internet hace 'pupa'.  

mamás imbatibles. Sobre los disfraces una voz autorizada es la de Silvia Pascual, integrante de un grupo de tres mamás (ella, Karen y Diana) y cinco niños (Martina, Héctor, Sophie, Enma y Olivia) que cada vez que se presentan ganan. El año pasado triunfaron como ¿pomperos? «Sí, sí, pompas de jabón». Los caballitos de mar y las velas de cumpleaños también causaron furor. 

Asegura que en enero es cuando tienen más o menos claro cuál va a ser el disfraz y entonces se ponen con ello. Sus creaciones están hechas a mano. Pueden ser telas, cartón... Todo vale. A fin de cuentas, ¡esto es Carnaval! ¿O no?