El verde y el blanco son los colores que más predominan este año en la alfombra de flores que nace de la imaginación y el corazón de José Antonio González Gerbolés. Son 18 años ya los que lleva haciéndose cargo, no solo de diseñar esta ofrenda del pueblo de Valladolid a su Patrona, sino también trabajando en ella durante horas. Y sus manos siempre están acompañadas de otras voluntarias que cada 8 de septiembre se acercan a la Plaza Mayor para colaborar.
González Gerbolés asegura que siempre cuenta con ciudadanos que no fallan ningún año a este montaje. Llegan al amanecer para ir colocando con cariño arena de colores en el suelo porque a las 10.30 horas debe estar toda la alfombra terminada. ¿Qué lleva a estas personas a querer echar una mano a este artista? Asegura que es el amor por la Virgen.
Pero siempre hay alguien nuevo cada año que quiere participar en esta ofrenda. "Hay personas que se acercan con todo el respeto. Con lágrimas en los ojos me han preguntado si podían colaborar. Están llenas de devoción y cariño. En su cara se ve que algo lleva en su corazón o en su alma que le ha hecho ir hasta allí. Lo ven como una forma de llegar a la Virgen a través de su trabajo", señala González Gerbolés.
Este artista asegura que el 8 de septiembre es el día para darle las gracias a las Patrona por su protección. Cree que, para pedirle cosas, ya están el resto de los 364 días del año. Este trabajo nunca puede empezar antes de las 2.30 horas de la madrugada y es que la Plaza Mayor es uno de los escenarios de las fiestas y donde miles de personas disfrutan cada noche de un gran concierto. Hay que esperar a que termine la música y los trabajadores del servicio de limpieza puedan despejar toda la zona. Luego llega el turno de González Gerbolés y todos sus colaboradores.
Extienden las plantillas para conseguir que la alfombra para la Virgen de San Lorenzo alcance los 60 metros. Con mimo van colocando los 3.500 kilos de arena blanca y los otros 1.000 kilos más de arenas de colores, que tinta él de forma artesanal en el taller. Los medallones y grecas de flores cogen forma poco a poco y nunca falta el escudo de la ciudad y la frase: Valladolid con su Patrona.
20 años caminando con la Patrona
Han pasado 20 años desde que la Patrona de Valladolid recorriera por primera vez sus calles. Los vallisoletanos arropan el 8 de septiembre a Nuestra Señora de San Lorenzo. Y con el paso de los años, la Virgen va más acompañada. Los pucelanos se animan más a estar junto a ella y ver su paso, por ejemplo, por la Plaza Mayor, donde le espera una alfombra de flores o su salida de la catedral. La Hermandad de Nuestra Señora de San Lorenzo ha querido celebrar esta fecha tan relevante adquiriendo una cruz alzada con ciriales especiales que encabezarán la procesión y una candelería nueva para los cultos.
La novena en honor a la Patrona comienza el jueves 31. Aunque una fecha destacada es el sábado 2 de septiembre, cuando la Policía Local baja la imagen de la Virgen y la pone sobre las andas que la llevarán de procesión.
Además, el domingo 3 la imagen de Nuestra Señora de San Lorenzo tendrá sus brazos abiertos para recibir las ofrendas de flores de los pucelanos. Desde las 10:00 horas se podrán entregar los ramos y participar en el besapiés. Aunque, sin duda, el día que más esperan los vallisoletanos para ver a su Patrona es el viernes 8, cuando sale a las 10.30 horas de la iglesia de San Lorenzo para ir a la Catedral, donde a las 12.00 horas se le ofrecerá una misa solemne. El hermano mayor la Virgen de San Lorenzo, Leopoldo Adiego, asegura que cada año aumenta el número de personas que se acercan a los cultos y a ver a la Patrona. De hecho, anima a los vallisoletanos a sacar un rato en estas fiestas para ir a verla.