La Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (Semes) defiende que estos servicios son de vital importancia dentro del Sistema Nacional de Salud y, por ello, reclaman la aprobación de la especialidad primaria de urgencias y emergencias con un «doble objetivo». «Por un lado, garantizar una asistencia homogénea y de máxima calidad (mediante una formación reglada, uniforme y especializada), y, por otro, para mejorar la planificación de los recursos humanos necesarios (gestión a largo plazo)», tal como explica la portavoz en Valladolid de Semes. «Solicitamos a todos los responsables políticos, la negociación y firma de un Pacto Estatal por la Sanidad Pública, liderado por el Gobierno de España, basado en el consenso y con compromiso social y sentido de Estado, buscando únicamente el bienestar público y, en este caso, el de los pacientes», argumenta la doctora Rosa Iban en declaraciones a El Día de Valladolid.

«La sanidad española se encuentra en un punto de inflexión», señala la especialista, quien detalla que «se enfrenta a una profunda crisis de la atención primaria y a la necesidad de aprobar la especialidad de medicina de urgencias y emergencias».

Iban apunta que «tanto atención primaria como urgencias y servicios de emergencias son pilares básicos en los que debe sostenerse el sistema», ya que recuerda que estos «son el acceso de una gran mayoría de ciudadanos y ciudadanas al Sistema Nacional de Salud». «Se está poniendo en riesgo el valioso Estado de Bienestar y España continúa sin reconocer la especialidad de medicina de urgencias y emergencias, quedándose atrás respecto a la mayoría de países europeos, anglosajones y primeras potencias mundiales».

«Se dan dificultades de funcionamiento cuando el hospital no drena adecuadamente los ingresos y la especialidad ayudará a reforzar estos servicios hospitalarios», concluye.