Perdonan a un empresario 2,6 millones de euros de deuda

D.V.
-

El vallisoletano, abogado de profesión, se hizo cargo en 2017 de una empresa de montajes escénicos que quebró por la paralización del sector en la pandemia, pero pudo volver a empezar gracias a la Ley de Segunda Oportunidad

Sergio Sanjuán Urdiales, abogado y empresario vallisoletano - Foto: Sergio Sanjuán Urdiales

Un empresario de Valladolid ha conseguido "una de las mayores quitas de deuda de la historia de España". Tras acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad, el abogado y empresario Sergio Sanjuán no tendrá que pagar 2,6 millones de euros de deuda y podrá recomenzar su vida profesional y personal, según ha informado el beneficiado en una nota de prensa. 

En el comunicado indica que hace poco se dictó una sentencia que supone "un récord histórico" en la condonación de una deuda a un empresario. En concreto, el Juzgado Mercantil número 2 de Valladolid exoneró el pasivo insatisfecho de Sergio Sanjuán Urdiales, concediéndole la conocida popularmente como Segunda Oportunidad por un total de 2,6 millones de euros.

El letrado emprendió una nueva actividad empresarial en 2017 que compatibilizó con su ejercicio como abogado en su despacho. Se hizo cargo de una empresa relacionada con montajes escénicos, que atravesaba alguna dificultad. La compañía contaba con una plantilla de 30 empleados y una cifra de negocio de 800.000 euros. No obstante, se puso al corriente de pagos en ocho meses, y en dos años elevó la cifra de facturación a casi cuatro millones de euros, creando 210 empleos, tal y como señala el comunicado.

Sin embargo, "la pandemia trastocó el futuro de la empresa, ya que las actividades de artes escénicas se pararon en seco" y tuvo que acogerse a los préstamos ICO para mantener el empleo y seguir abierta. Con esta deuda y sin ingresos durante mucho tiempo, el negocio se liquidó en verano de 2022, fruto también del corte de circulante de una entidad financiera que dejó de apostar por el negocio. Este cierre provocó la liquidación en cadena de las empresas del letrado y de su patrimonio, en el que se incluía su vivienda habitual, al ejecutar los bancos todos los avales personales que éste comprometió para el afianzamiento de sus empresas durante la pandemia.

Su experiencia en el mundo legal y la nueva reforma de la Ley Concursal le permitieron obtener "una de las exoneraciones personales de deuda más elevadas de Castilla y León y puede que de España".

Así, el abogado, padre de diez hijos, podrá recomenzar su vida a los 50 años. "Hay que acabar con el estigma de la muerte empresarial que supone el fracaso de un proyecto o negocio. En otras culturas, se valora el aprendizaje y el riesgo que comporta el hecho de emprender, más allá del éxito que comporte. Si cambiamos esta percepción, conseguiremos que muchas personas puedan recomenzar su vida, un derecho al que tendríamos que poder aspirar todos", afirma el abogado.