La Dirección Nacional de las Obras Misionales Pontificias ha señalado que, durante el ejercicio económico del 2022, la Dirección Diocesana de Valladolid ha recaudado un total de 655.702,53 euros.

Así lo ha explicado este jueves el delegado de Misiones de la Diócesis, Javier Carlos Gómez, y la misionera Maga Tamayo, durante la presentación de las cuentas de la Delegación de Misiones y balance de la presencia misionera de Valladolid.

Los datos económicos se dividen en tres obras principales. La primera se trata de la propagación de la Fe mediante el Domund, la cual ha recaudado un total de 361.319,30 euros; la obra de San Pedro Apóstol ha percibido un total de 142.689,60 euros y, por último, la Infancia Misionera a través de colegios y catequesis ha conseguido 151.693,63 euros.

En cuanto al resto de provincias de Castilla y León, la aportación económica de las Diócesis a propagación de la Fe la encabeza Valladolid con 361.319,30 euros; seguida por Burgos con una aportación de 248.606,50 euros; Salamanca con 148.826,46 euros; 124.462,16 euros por parte de León; seguido de Ávila y Palencia con 97.729 y 97.765 euros, respectivamente; Astorga con 65.248 euros; 57.507 euros en Segovia; un total de 50.791 euros por parte de Zamora y, para concluir, Osma (Soria) y Ciudad Rodrigo con 38.978 y 17.468 euros, respectivamente.

Por otro lado, el delegado ha señalado que de la Dirección de Valladolid hay un total de 154 misioneros en 41 diferentes destinos entre África, Asia y América. Venezuela es el país en el que más misionero hay, con un total de 16, seguido de Perú con 13, once en Italia, y nueve en Brasil.

En este sentido, Javier Carlos Gómez ha explicado que los misioneros vallisoletanos abundan en países donde se habla castellano porque es "más sencilla la comunicación".

Así, el delegado también ha destacado que existe "un descenso en las personas que frecuentan las organizaciones religiosas, dada a la alta edad media que hay entre ellos, pero se mantienen los datos de los misioneros".

Por otro lado, Maga Tamayo ha señalado que su vida misionera ha estado consagrada 16 años entre Centroamérica, Honduras, Guatemala y, los últimos 11 años, en Argentina, a lo que ha añadido que esta ha comenzado con el lema "un corazón apasionado que pone mis pies en camino hacia el otro".

"La misión no tiene que ver con el empobrecimiento económico, sino con el empobrecimiento del alma y del corazón de la gente", ha destacado la misionera y, en este marco, ha añadido que "la misión no nace de un mandato o de un cumplimiento, sino de una experiencia y de un encuentro personal con un Jesús porque te apasiona su vida y el poder seguirle de cerca, además de hacer de tu vida Evangelio para muchos, encarnar en tu vida los valores de este".

Para concluir, Maga Tamayo ha apuntado que la gustaría hacer un llamamiento a la ayuda económica porque "cuando tú ves la realidad del mundo y dejas que te afecte, hay una parte que te moviliza y no puedes no ponerte en camino".

Además, ha explicado que invita a la gente a aportar pensando "no solo en esa realidad del mundo, sino en todas las personas que ponen la vida, dejan a sus familias, la comodidad aquí, y se entregan en los distintos países, en los distintos lugares", por ello, "necesitan un sostén económico para una casa y pagar las cuentas", ha terminado.