El VRAC Quesos Entrepinares y el Cetransa El Salvador presentaron ayer junto a los médicos del Centro de Medicina Deportiva Raquel Blasco y Jesús Losa; y el director del Proyecto Salvavidas, Rubén Campo, su implicación para con el mismo. Están vendiendo las pulseras salvavidas a un precio de tres euros (en el día de sus partidos) con el objetivo de recaudar lo suficiente como para financiar un desfibrilador semi-automático para los campos de Pepe Rojo y la formación pertinente sobre cómo usarlo y complementarlo con técnicas de reanimación para técnicos y jugadores de ambos clubes.

Según explicó Rubén Campo, cualquier entidad puede sumarse al Proyecto Salvavidas y conseguir sin coste alguno las pulseras salvavidas, con diseño de Kukusumuxu y mediante cuya venta que se financian los desfibriladores y los cursos de formación. Iniciativa a la que se han sumado unas 500 entidades a nivel nacional.

Raquel Blasco, doctora del Centro de Medicina Deportiva e impulsora de esta iniciativa junto a su colega Jesús Losa, elogió la predisposición de los dos clubes de rugby de Valladolid, siendo los primeros de División de Honor que cuentan con esta infraestructura para evitar la muerte súbita en los campos de rugby. «Hemos unido a los dos clubes de rugby de Valladolid, los mejores. Más no se puede pedir», apuntó.

En representación del VRAC Quesos Entrepinares estuvo su técnico y jugador, Lisandro Arbizu, quien destacó la «brillantez» de la idea a la hora de «evitar» cualquier problema de esta índole en los campos de Pepe Rojo. «Les felicito y apoyo al cien por cien», ha dicho. Por su parte, Fernando Suárez, gerente del Cetransa El Salvador, agradeció al Centro de Medicina Deportiva y al Proyecto Salvavidas la ayuda que prestan con esta acción, la cual ha tildado de «muy positiva».

Francisco Blanco y Joe Mamea recibieron la primera lección de reanimación.