El corte del túnel de Labradores atasca la Circular hasta la avenida de Soria

Luis Amo
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Las retenciones alcanzaron 1,5 kilómetros a las nueve de la mañana · El colapso llegó hasta Vadillos, Cruz Verde, Santa Cruz y Caño Argales · El paso inferior se reabrió anoche al tráfico

Túnel de San Isidro, que conecta la Circular con la avenida de Soria. - Foto: J.T.

«No recordaba un atasco tan monumental». Una agente de la Policía Municipal explicaba ayer de esta manera la situación del tráfico registrada a primera hora de la mañana en el entorno de la plaza Circular como consecuencia del cierre al tráfico del túnel de Labradores:«Fue una situación caótica donde muchos conductores no sabían si iban o venía», precisaba esta funcionaria que estuvo durante toda la mañana en la zona regulando la circulación. Y es que, tal y como confirmaron también fuentes de la Jefatura de la Policía Municipal, la peor hora fue poco antes de las nueve de la mañana, cuando los atascos se registraron por la Circular, todas sus calles adyacentes e incluso alcanzaron la avenida de Soria. En definitiva, un kilómetro y medio de colapso.
El entorno de la Circular de Valladolid más bien parecía ayer la M-30 de Madrid en hora punta. Y es que el cierre del túnel de Labradores por obras de mantenimiento supuso que los atascos se multiplicasen desde el centro por la plaza Circular, Cruz Verde, Santa Cruz o del Caño Argales hasta Las Delicias, en la carretera de Soria y paseo de Farnesio, pasando por el túnel de Casasola de Vadillos. Un mapa de atascos de tráfico que nadie recordaba, como reconocen fuentes policiales. Aunque durante toda la jornada la circulación fue bastante más densa que habitualmente, lo cierto es que los momentos más problemáticos se registraron a primera hora de la mañana y al mediodía y, más en concreto, sobre las 9 de la mañana y a las 2.30 de la tarde.
Los pasos inferiores de Circular y Vadillos ante el cierre del paso a nivel de La Pilarica fueron los puntos que absorbieron el tráfico pero que no fueron suficientes hasta el punto que a primera hora estaba completamente colapsado todo el anillo de la plaza Circular, las calles adyacentes y esto provocaba que las colas llegasen hasta la avenida de Soria, es decir, el paseo de San Isidro, la rotonda de Juan Carlos I y su continuación.
Un colapso «sin precedentes» por mucho que no hace tantos años coincidieran al tiempo obras en un tramo del paseo de Zorrilla y en su paralelo de la avenida de Salamanca. Sin embargo, ayer fue peor aunque numerosos agentes policiales trabajaron intensamente durante toda la jornada para intentar minimizar las molestias a los conductores. Unos conductores, por cierto, que no escondieron su enfado ante este monumental atasco. Hoy, por contra, la situación volverá a la normalidad dado que el corte sólo era para ayer.