Un ahorro crucial

Agencias
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Optimizar un bien escaso como el agua es vital en un momento en el que los embalses se sitúan por debajo del 40% de su capacidad

Vista de la antaño rebosante de caudal cuenca del Miño-Sil, en Portomarín (Lugo). - Foto: Eliseo Trigo (EFE)

Solo el 15 por ciento del agua se destina para el uso doméstico en España y el 70 para la agricultura. Esa es la radiografía en el país del consumo de un bien escaso. Un recurso finito que, con medidas fáciles de adoptar, lograría un ahorro fundamental, en un momento en el que los embalses se encuentran por debajo del 40 por ciento de su capacidad total. Así lo explica el técnico del programa de agua de la organización WWF, Alberto Fernández, asegurando que es necesario «hacer algunos cambios» en los hogares y en los cultivos.

Y es que, como destaca Fernández, España vive un período de «sequía hidrológica y meteorológica», con una reserva en los embalses, actualmente en el 39,9 por ciento de su capacidad, que tiene que ver con el uso que se hace del agua de pantanos y acuíferos en primer lugar, y las consecuencias del cambio climático en última instancia.

Según este técnico, una opción sería decantarse por cisternas para los baños con menor capacidad «en vez de los 14 litros habituales», o reducir el riego de jardines, ya que «el agua es un bien escaso y finito» y en la mayoría de ocasiones se produce «un derroche del recurso».

El consumo medio recomendable está en 170 litros al día por habitante, lo cual incluye «agua para beber y servicios como la limpieza o la higiene personal», sin embargo, el problema viene en «las casas con piscina».

En este sentido, Fernández advierte que la normativa «ya exige que no se vacíe más de un tercio de agua» de estas instalaciones, para lo cual es importante «invertir en filtros de calidad».

Pero la mayor «clave» para ahorrar agua, mantiene, es restablecer el sistema de regadíos, porque -apunta- «hay una baja eficiencia en el uso del recurso».

Cuarta Ola de calor. A los problemas hídricos que ya vive España se añadirá además una nueva ola de calor, la cuarta que se registra en lo que va de verano, que comenzará hoy y se extenderá probablemente hasta el miércoles, según informa la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que indica que 36 provincias estarán en alerta por altas temperaturas.

Durante la presente jornada es probable que se alcancen los 38 o 40 grados centígrados en el medio Ebro, depresiones del nordeste, sur de los Pirineos, extremo nororiental de Cataluña, valle del Guadalquivir y oeste de Andalucía, sin descartar que se rocen también estos valores localmente en puntos del valle del Guadiana y zonas bajas del centro peninsular. Además, los 36 grados serán generalizados en el interior peninsular, salvo en Galicia y el noroeste de Castilla y León.