De ir en un 600 a un Ferrari

SPC
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Doscientos sordociegos se beneficiarán de un nuevo sistema de comunicación dactilológico con un millar de palabras y expresiones

Jorge Pérez prueba el nuevo sistema junto a la intérprete Miriam García, en presencia de Rocío Lucas e Ismael Pérez. - Foto: Ical

Un total de 200 personas con sordoceguera de la Comunidad y otros 15 estudiantes se beneficiarán de un nuevo sistema de comunicación dactilológico, llamado Dactyls, que ahorra tiempo y facilita el acceso al conocimiento y a las relaciones con el entorno de las personas con esta discapacidad. Este sistema permite conocer lo que pasa casi en el momento mediante un «idioma» nuevo de un millar de palabras y expresiones, una parte de ellos adaptados de la lengua para sordos, que en la práctica supone pasar de tener que deletrear en la palma de la mano letra por letra a reconocer expresiones enteras. Al final, es «como pasar de ir en un 600 a hacerlo en un Ferrari», como detalló el delegado territorial de la ONCE en Castilla y León, Ismael Pérez.

Con este nuevo sistema y la aplicación móvil asociada, desarrollada por el Centro de Tiflotecnología e Innovación de la ONCE y la Universidad Complutense de Madrid, se mejora la comunicación ya que cuenta con unos un millar de signos, entre palabras completas, grupos de palabras o expresiones de la lengua oral. De esta manera, las personas con sordoceguera reciben una información, en la palma de su mano o incluso en el brazo y otra parte del cuerpo, de la manera más simultánea.

Pérez, destacó ayer en Valladolid el avance que supone Dactyls, ya que se pasa de un lenguaje que deletrea letra a letra a otro que utiliza palabras. «Se simplifica lo anterior y así estas personas tendrán una información rápida de lo que ocurre a su alrededor, lo que supone un valor incalculable», señaló en declaraciones recogidas por Ical.  Algo que reconoció Jorge Pérez, una persona con sordoceguera, junto a la intérprete Miriam García, tras demostrar que el nuevo sistema Dactyls es más ágil y rápido. «En una intervención, se puede captar todo sin que nos saltemos parte de una conversación como ocurre con el lenguaje tradicional dactilológico», apuntó. 

Por su parte, la consejera de Educación, Rocío Lucas, consideró que este sistema es un paso más en la equidad que persigue la Junta en la educación. Y es que precisó, según recogió la Agencia Ical, que es una herramienta para prestar la mejor atención al alumnado con discapacidad visual. En la actualidad, hay 351 niños y jóvenes de la ONCE que están en la educación ordinaria. 

Lucas mostró su orgullo de poder trabajar junto a la ONCE y así contribuir a lograr una sociedad «mejor, más integradora, más humana, en la que la igualdad». «Al hablar del desarrollo de una sociedad, no solo se mide por su situación económica sino también por cómo trata a las personas que más lo necesitan y eliminar barreras. Podemos presumir que en España y Castilla y León somos punteros, gracias en parte al papel destacado de la ONCE», añadió.

Pérez destacó el éxito «razonablemente bueno» del modelo educativo practicado por la ONCE en los últimos 35 años, que se traduce en bajos niveles de fracaso escolar, que en el caso de los niños ciegos es del seis por ciento, muy por debajo de la media nacional y de la Unión Europea. Valoró la apuesta de la institución por la innovación pedagógica y tecnológica. «Se trata de poner cariño y recursos», concluyó.