La Guardia Civil ha detenido en el municipio vallisoletano de Corrales de Duero al exmilitar buscado desde hace días por el supuesto secuestro de su expareja. Allí estaba también la mujer, en principio, en perfecto estado.
Un centenar de agentes buscaban desde el martes en la comarca de la Ribera del Duero a este ciudadano búlgaro y a su expareja, presuntamente retenida por éste. El operativo se centraba esta mañana en territorio vallisoletano, en la zona de Corrales de Duero, cerca de Peñafiel, donde finalmente ha sido arrestado, tal cómo ha podido saber El Día de Valladolid.
En el dispositivo participaban efectivos de las comandancias de Valladolid y Burgos, así como 50 antidisturbios del GRS, dada la aparente peligrosidad del fugado. Fuentes del caso consultadas por este periódico explican que se trata de "un exmilitar buscado por asesinato en su país" y que habría tenido retenida contra su voluntad a su ex, por lo que en principio se le acusa de un supuesto delito de detención ilegal.
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La búsqueda arrancó el martes y se intensificó el jueves, con un operativo complejo en el que se ha ido siguiendo el rastro del sospechoso, así como los lugares por los que ha ido pasando la pareja durante estos años en la Ribera. Aunque su domicilio actual estaba en el municipio burgalés de San Martín de Rubiales, Kiril B.N., de 53 años, se ha movido por toda la comarca por trabajo. La mujer, por su parte, estuvo trabajando en Valbuena y tenía allí casa, por lo que fue uno de los primeros lugares donde buscó la Guardia Civil el pasado martes. El rastreo, por tanto, se centraba en los municipios de la 'frontera' entre Valladolid y Burgos, una zona que, al parecer, Kiril B.N. domina.