La Seca está viviendo de lleno diez días de celebraciones con la Semana Cultural y las Fiestas de los Novillos. Si la primera fue la protagonista del 28 de julio al 2 de agosto; desde el 3 y hasta el lunes, 7, le ha cogido el testigo las segundas, con el toro y la música como principal reclamo y con las peñas ejerciendo un importante papel. 

«Son unas fiestas que son referentes», señala la alcaldesa de La Seca, Clara Eufemia Rivera Vidal, añadiendo que «las peñas son la nota de color en las fiestas», agradeciendo así que la juventud apueste por actividades como los torneos de rana, fútbol o pádel, y por Djs, charangas, meriendas... La alcaldesa sabe que estos días la localidad pasa de los 1.076 habitantes a duplicarse o incluso triplicarse, con el viernes y el sábado como días fuertes.

El programa festivo, que arrancó este jueves con el desfile de peñas y el pregón a cargo del equipo de la localidad, tras su ascenso a Segunda Provincial, incluye nueve festejos con los toros como protagonista. «Las fiestas se llaman así y tiene que haber novillos, porque son en su honor», añade la alcaldesa. Siete serán encierros, uno infantil y seis tradicionales, por las calles de La Seca. Además del toro de las peñas y la verbena taurina gratuita. Todo por las calles del municipio y posterior suelta de reses en la Plaza de Toros. 

«Tenemos, además, orquestas, macrodiscos, djs, conciertos, charangas... para que haya variedad para todos los gustos y edades, y que todo el mundo tenga su rato para pasárselo bien», señala la regidora.

Todos los años, en colaboración con la Diputación, suelen organizar algún programa y en esta ocasión será el Epsylon, con información sobre alcohol, cannabis y tabaco: «Es una manera de que los más jóvenes vean lo importante de la convivencia».

Y, por segundo año consecutivo, contarán con una paellada popular, que en esta ocasión será el sábado con 600 inscritos: «Se incluyó el año pasado y se repite porque gustó mucho. Este año seremos 200 personas más».

«Todos los días son grandes en La Seca, aunque es verdad que viernes y sábado es cuando más gente viene. La orquesta el domingo es costumbre, y ahí se ha quedado siempre», concluye Clara Eufemia Rivera.