Lo bueno, si grande, dos veces bueno

M.B.
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El restaurante Gigantes lleva 29 años apostando en Valladolid por hamburguesas de 22 centímetros; perritos, de 25; y sándwiches, de 30

Mireya, en el restaurante Gigantes. - Foto: Jonathan Tajes

Aquí todo es, como el nombre, gigante. Las hamburguesas miden entre 20 y 22 centímetros de diámetro; los perritos son de 25 centímetros; los sándwiches, de 30; y las baguettes, de una barra entera. Hay burguers y sándwiches dobles; e, incluso, una hamburguesa de cuatro pisos. «Lo bueno, si grande, dos veces bueno», es su lema. El restaurante Gigantes es un clásico de la capital. Por él han pasado estudiantes que luego fueron con sus parejas y ahora lo hacen con sus hijos: «Incluso alguno de estos últimos ya vienen, ahora, como estudiantes».

En Valladolid abrió sus puertas en 1995, hace ya 29 años: «Para el año que viene haremos algo especial por ese 30 aniversario». Lo hizo en la calle Perú de la mano de Mariano y su hijo, Ricardo. Aunque la idea viene de Alicante, de los tíos de Ricardo, Fernando y Raimundo: «Son de aquí pero, tras emigrar a Alemania, regresaron y se asentaron en Alicante.Allí regentaban carnicerías cuando a Fernando, nadie sabe el porqué, se le ocurrió hacer una hamburguesa gigante». Ofreció el producto a un restaurante y tras ver su éxito, cambiaron de sector, pasando de las carnicerías a los restaurantes, con los nombres de 'Gigantes', 'Goliat'... en Alcoy, Murcia, Alicante... 

Aquello fue a finales de los años 80 del pasado siglo. Mariano y Ricardo cogieron la idea y abrieron primero en calle Perú y en 2004 en García Lesmes, 3: «Mantuvimos un año los dos locales».

Hamburguesa Kraken, en Gigantes.Hamburguesa Kraken, en Gigantes. - Foto: Jonathan TajesEmpezaron con hamburguesas, perritos y sándwiches. En 2005 llegaron las baguettes. Y antes de la eclosión del covid, las patatas Panzus, los nachos... además de hamburguesas gourmet, «ya no de tamaño gigante», aunque todas, las grandes y las 'normales', bajo una premisa: «Prohibido poner huevo frito, es un sacrilegio».

«No nos consideramos un restaurante de comida rápida», deja claro hoy en día Ricardo, explicando que se elabora todo en el local y que para las carnes tienen una máquina especial, así como unas paletas exclusivas para dar la vuelta a las mismas –como se ve en la foto a Mireya–: «El pan de las hamburguesas y perritos lo elaboran de manera artesanal para nosotros. Por eso, a veces varía un poco el tamaño».

¿Y los precios? ¿Son gigantes? «Hay hamburguesas, como la clásica, desde 8,5 euros», responden. La kraken, que es doble, sale por 12,80; y la goliat, que es 'normal', pero de cuatro pisos, por 23,90. Hay un menú dúo, con hamburguesa, sandwich, perrito o baguette, más un combo de patatas normales, patatas gajo y nuggets, y dos bebidas, por 18,90. «Buscamos la calidad en los proveedores y unos precios contenidos. Por eso nos mantenemos», añade Ricardo.

Entre sus creaciones más demandadas están, además de las hamburguesas, las patatas panzus, el sandwich de pollo y el de dos pisos, llamado cronos: «Y, aunque la gente cree que podemos tener una clientela más joven, tenemos a muchos jubilados que vienen a por un vegetal y una cerveza».

Abierto de martes a domingo, de 19.00 a 23.00 o 00.00 horas, el 'Gigantes' tiene una capacidad para unos cien comensales –«con el hándicap de no tener una terraza, lo que hace que en verano disminuya el trabajo», explican– y una decoración en la que se dibuja un universo de gigantes inventado, con la 'G' característica de un local donde Kraken, Goliat, Cronos, Panzus se asoman en sus paredes...