Las del próximo 23 de julio serán, por muchos motivos, unas elecciones generales especiales: se realizarán en verano, en pleno período vacacional; su celebración se anunció solo un día después de conocerse los resultados de los anteriores comicios, municipales y autonómicos; y su convocatoria supuso, de facto, el enganche de una campaña electoral, la del 28-M, con otra, la del 23-J.
Por si fuera poco, esta cita con las urnas, en la que se decidirá la futura Presidencia del Gobierno de España, supuso la ruptura definitiva entre el hasta ahora bloque unitario, aunque no falto de choques, formado por las fuerzas de la izquierda. También volvió a poner sobre la mesa los descontentos internos en el seno del PSOE, a cuenta de sus listas, así como la complejidad de los pactos para constituir Gabinetes entre el PP y Vox.
Pero el anticipo de las generales engloba, además, otros detalles. Singularidades y novedades, como la ley de nietos, que pueden afectar al resultado que arroje la cita, así como a la mismísima Corona, garantizando el juramento de la Princesa Leonor en tiempo y forma.
Implican, en su conjunto, una mirada más allá de las urnas y del 23-J como comicios, y aúnan datos curiosos que bien merece la pena conocer, como el hecho estadístico de que el partido ganador de las elecciones municipales, bien el PSOE o bien el PP, ha sido siempre, salvo en una ocasión en toda la historia de la democracia española, el vencedor en las generales inmediatamente posteriores, y también el que gobernó en el país. Asimismo, la diferencia a favor del vencedor de las locales se incrementó casi siempre en las generales.
El patrón es constante tanto en la época del bipartidismo como en la etapa que incluye a nuevas formaciones, como Podemos, Ciudadanos o Vox. Solo en una ocasión el resultado de unas municipales no se repitió en unas generales: fue en las municipales de 2007, cuando hubo casi un empate, y luego, en 2008, los socialistas resultaron claramente vencedores y se mantuvieron en el Gobierno central.
En el resto de la historia de la democracia, el ganador de las municipales repitió siempre victoria en las generales y gobernó.
Así sucedió con UCD en los primeros comicios locales en 1979 y, después, con los socialistas durante su fuerte hegemonía de los 80.
Lo mismo pasó en las décadas posteriores, con la única excepción citada. Habrá que ver qué ocurre este 23-J; una cita que rompe esquemas desde su convocatoria.
Cita clave para la Corona
El adelanto de las elecciones generales al 23 de julio allana el camino para que la Princesa Leonor jure la Constitución ante las Cortes Generales en una sesión solemne en el Hemiciclo del Congreso el próximo 31 de octubre, cuando cumplirá 18 años, después de que se hubiera barajado la posibilidad de aplazar este acontecimiento.
Este trámite que recoge la Constitución en su artículo 61 quedó en duda ante la previsión inicial de que los comicios se iban a celebrar a finales de año, posiblemente en diciembre, lo que suponía que las Cámaras estarían disueltas en el cumpleaños de la Heredera.
Con la convocatoria anticipada del 23-J, si no hubiera que repetir los comicios por el bloqueo en la formación de Gobierno, las nuevas Cortes estarían ya constituidas antes de finalizar el verano, por lo que se facilitaría el que Leonor de Borbón pudiera jurar la Constitución el mismo día de su 18 cumpleaños, como hizo su padre, Felipe VI.
La Carta Magna estipula que «el Príncipe Heredero, al alcanzar la mayoría de edad», prestará juramento y fidelidad al Rey, sin concretar si esta ceremonia podría celebrarse en fechas posteriores.
Cuando Leonor de Borbón cumplió 17 años, el Gobierno abrió la puerta a posponer este trámite clave para la Corona hasta la constitución de un nuevo Parlamento para no tener que hacerse ante la Diputación Permanente, lo que le hubiera restado solemnidad al no estar todos los diputados y senadores. «Ya se organizarán las Cámaras para dar cumplimiento al mandato (…) En política, un año es una eternidad», señaló entonces la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez.
El pasado marzo, Rodríguez garantizó que el juramento de la Heredera se haría cumpliendo con «todas las previsiones constitucionales» y de acuerdo con la Casa del Rey, que no se ha pronunciado por ahora sobre este asunto.
«El momento en que haya de producirse lo haremos, como es habitual en las normales relaciones institucionales con la Casa del Rey, en el momento en que se considere oportuno», manifestó la portavoz del Gobierno sin dar más detalles sobre posibles fechas.
La Princesa de Asturias concluyó su Bachillerato en el internado de Gales (el Reino Unido) el pasado mayo y comenzará su formación militar en la Academia General de Tierra en Zaragoza el 17 de agosto.
Mujeres como cabezas de lista
Veintitrés de las 52 candidaturas presentadas por el PP al Congreso y publicadas en el BOE esta pasada semana están encabezadas por mujeres, cifra superior a la del PSOE y Sumar (22 en cada caso) y muy alejada de la de Vox, con solo 15 listas lideradas por féminas.
Se trata todavía, eso sí, de listas provisionales, ya que tienen que ser revisadas aún por las respectivas juntas electorales provinciales. El próximo día 27 se publicarán las candidaturas y se abrirá un plazo para presentar recursos.
La ley de Igualdad aprobada en 2007 apostó por la paridad en la política y fijó que una «presencia equilibrada» de hombres y mujeres en órganos y cargos de responsabilidad implica que las personas de cada sexo no debían superar el 60 por ciento ni ser menos del 40 por ciento, un equilibrio que debe cumplirse en las listas.
Las candidaturas presentadas por los principales partidos respetan la norma, que no dice nada sobre los números uno. Tras analizar las de las cuatro principales fuerzas con representación parlamentaria, las mujeres lideran el 44,2 por ciento de las listas del PP al Congreso, el 42,3 en el caso del PSOE y Sumar, y el 28,8, en el de Vox.
Para la presidencia del Gobierno, en cualquier caso, solo Sumar apuesta por una mujer, con su líder y vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, al frente de la candidatura por Madrid.
El anteproyecto de ley diseñado por el Gobierno de coalición para llevar la paridad a los distintos círculos de poder, de la empresa a la política, daba un paso más y obligaba a presentar listas cremallera, en el que se alternen candidatos de ambos sexos, pero ha quedado finalmente en agua de borrajas con el adelanto electoral.
El PSOE apostó ya internamente en 2015 por esta vía y sigue ese criterio de cara al 23-J, aunque con algunas excepciones.
Se lo salta, por ejemplo, en Toledo y Zaragoza, dos de las provincias en las que hubo choque por las imposiciones de Ferraz. En el primer caso, los números dos y tres son mujeres, Milagros Tolón y Esther Padilla; en el segundo son la número uno y la dos, Pilar Alegría y Susana Sumelzo.
Mientras, fuentes de Vox apuntan que son los 52 comités provinciales del partido quienes confeccionan las candidaturas «a su saber y entender» -listas que deben recibir luego el visto bueno del Comité Ejecutivo Nacional- y precisan que «no hay un criterio único específico mientras cumplan» la ley, aunque no la compartan.
Las novenas anticipadas
Las del 23 de julio serán las novenas elecciones generales que se celebran de forma anticipada en España: se adelantaron dos durante los Gobiernos de UCD, seis con el PSOE y una con el PP. Es, no obstante, la primera vez que un jefe del Ejecutivo convoca unos comicios generales al día siguiente de celebrarse otra cita con las urnas (28-M), sin demora alguna.
Las primeras elecciones adelantadas tuvieron lugar en marzo de 1979.
El 29 de diciembre de 1978 entró en vigor la Constitución, al ser publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), y ese mismo día Adolfo Suárez, que había sido elegido presidente en 1977, anunció la disolución de las Cortes y la convocatoria en las urnas.
Con UCD en crisis, Leopoldo Calvo Sotelo firmó el siguiente adelanto electoral y los comicios se celebraron en octubre de 1982.
Los votantes dieron la mayoría absoluta a Felipe González, que no concluyó ninguna legislatura durante su mandato.
En cambio, José María Aznar agotó sus dos legislaturas y José Luis Rodríguez Zapatero decidió adelantar elecciones en su segundo mandato. Los españoles, llamados a las urnas en noviembre de 2011, dieron la victoria al PP.
Mariano Rajoy concluyó su primera legislatura y las elecciones se celebraron el 20 de diciembre de 2015, pero no consiguió apoyos suficientes para ser elegido de nuevo presidente y en junio de 2016 se repitieron los comicios.
Tras ganar la moción de censura a Rajoy y ser nombrado jefe del Ejecutivo en 2018, Pedro Sánchez decidió convocar elecciones en abril de 2019, pero tampoco consiguió cerrar los acuerdos necesarios para ser investido.
Así, por segunda vez consecutiva se tuvieron que repetir unas generales, que se celebraron el 10 de noviembre de 2019.
Más de 26.000 nacionalizados
Más de 26.000 personas que han obtenido la nacionalidad española en los últimos meses gracias a la ley de Memoria Democrática, conocida en el extranjero como la ley de nietos, podrán votar por primera vez en las elecciones generales del próximo 23 de julio. La entrada en vigor de la norma a finales de octubre 2022 desencadenó una avalancha de peticiones de nacionalidad en los consulados españoles de todo el mundo, que supuso la aprobación de 26.477 expedientes hasta el pasado 31 de marzo de 2023, según datos del Ministerio de Exteriores.
La ley de nietos concede la nacionalidad española a quienes tuvieran padre, madre, abuelo o abuela que fue español pero dejó de serlo al exiliarse por razones políticas, ideológicas, religiosas o de identidad sexual.
Muchos ya han tenido la oportunidad de votar en las elecciones autonómicas y municipales del 28-M; otros muchos podrán hacerlo por primera vez en las generales del 23-J.
Para que tengan plenos efectos, los recién nacionalizados deberán inscribirse en el Registro Civil, un trámite con el que se cierra el proceso y los nuevos españoles podrán ser incluidos en el censo electoral.
La oleada de solicitudes puso en aprietos a los consulados, como reconoció el propio ministro de Exteriores, José Manuel Albares, quien solicitó la contratación de hasta 600 personas para reforzar las plantillas de trabajadores para atender las demandas de las personas interesadas en realizar este trámite.
Para facilitar aún más los diferentes requisitos burocráticos, el Gobierno aprobó el pasado mes de mayo la tramitación urgente de un real decreto sobre la concesión de la nacionalidad española por carta de naturaleza (un procedimiento más rápido) a los voluntarios integrantes de las Brigadas Internacionales, que participaron en la Guerra de 1936 a 1939.
También se aplicará el mismo criterio a los hijos y nietos de los brigadistas «que acrediten una labor continuada de difusión de la memoria de sus ascendientes y la defensa de la democracia en España».
Estos nuevos españoles se suman a los 47.712 ya inscritos previamente en el Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero (PERE) a 1 de enero de 2023, casi un 20 por ciento de los cuales es mayor de 65 años.
El 59 por ciento de los nuevos registrados tenía fijada su residencia en América, la mayoría en Estados Unidos y México; el 37,7 por ciento en Europa, principalmente en Francia, y el 3,6 por ciento en el resto del mundo.
Los datos del PERE también reflejan que casi seis de cada 10 de los nuevos inscritos nació en el país en el que reside habitualmente, frente a los tres de cada 10 que nacieron en España.
Todos ellos podrán votar en las próximas elecciones generales, siempre y cuando estén incluidos en el Censo de Españoles Residentes en el Extranjero (CERA) que gestionan los consulados y en el que pueden inscribirse o rectificar sus datos entre el 5 y el 12 de julio.
Seis eventos en la agenda de Bruselas
La campaña para las generales coincidirá con seis eventos previstos en la agenda de la Presidencia española del Consejo de la UE, a los que se sumará la cumbre de la OTAN que tendrá lugar en Lituania.
España asumirá el 1 de julio ese cargo semestral, y el adelanto de las elecciones se asegura desde Moncloa que no va a afectar a la responsabilidad que contraerá el país porque se trata de una cuestión de Estado y se mantendrán las previsiones.
No obstante, sí habrá alguna alteración sobre la agenda inicial ya que, por ejemplo, el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha pedido al Parlamento Europeo aplazar su comparecencia prevista para el 13 de julio en la que iba a informar de las prioridades de esa Presidencia.
Otra modificación es la cancelación del concierto que con motivo del inicio de esta etapa se iba a organizar en Madrid, con la presencia del Rey y el presidente del Gobierno.
Sánchez, que el 29 y 30 de junio, justo antes de asumir esa Presidencia semestral, participará en una reunión del Consejo Europeo en Bruselas, tendrá también en plena campaña otros dos relevantes actos internacionales.
Será el 11 y 12 de julio cuando estará en Vilna, la capital de Lituania, para asistir a la cumbre de la OTAN, y viajará pocos días después a Bruselas para participar el 17 y 18 de julio en la cumbre Unión Europea-CELAC (los países de América Latina y el Caribe).
Además, durante los días de la campaña, que arranca el 7 de julio, España acogerá cuatro importantes reuniones de comisarios europeos y ministros de todos los socios comunitarios.
Del 10 al 12 de julio se desarrollará en Valladolid el consejo que reunirá a los comisarios y ministros de Energía y Medio Ambiente de la UE; el 13 y 14 se ha convocado en Madrid a los integrantes del Consejo de Empleo, Política Social, Sanidad y Consumidores; el 17 y 18 habrá en Vigo una cita del Consejo de Pesca; y del 19 al 21 se ha fijado en Logroño un encuentro del Consejo de Justicia e Interior.
A la semana siguiente de las elecciones, hay previstos otros tres consejos: el 24 y 25 de julio en Bilbao el de Competitividad; y el 27 y 28 se celebrará en Las Palmas de Gran Canaria el de Salud y en Santander el de Investigación.
Finalmente, antes de que España asuma la Presidencia, también hay cerrada ya alguna actividad relacionada con ello, como la reunión que mantendrá Sánchez en el Palacio de la Moncloa con la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, el próximo día 26 de junio.