El VRAC Quesos Entrepinares se ha proclamado este sábado campeón de la Copa Ibérica, por séptima vez en su historia, tras doblegar a un rival al que nunca había ganado, el Direito; y además en Monsanto, Lisboa. Con todo en contra y ante un rival plagado de mundialistas, esta vez sí pudo, después de que en las tres ocasiones anteriores viera cómo la Taça Ibérica se le escurría, tanto en Pepe Rojo como en tierras lusas: 16-20 en 1999 (Pepe Rojo), 41-11 en 2013 (Monsanto) y 22-12 en 2015 (Estadio Nacional Jamor, en Oeiras). Pero este sábado tocaba ganar (8-13).
En el palmarés quesero ya lucen así siete ibéricas: las de 2014, 2017, 2018, 2019, 2020, 2021 y ahora también la de 2023.
Los de Diego Merino levantaron la Taça tras un encuentro equilibrado que se acabó decidiendo en el segundo periodo gracias a un ensayo del neozelandés Siosua Moala y la transformación del argentino Baltazar Taibo, quien había abierto el marcador en los primeros compases.
Otra foto para la historia. - Foto: VRAC Quesos EntrepinaresEl conjunto luso logró irse al descanso con ventaja (5-3) con una marca de Duarte Portela, pero tras el descanso retomó el mando el VRAC con un golpe de castigo de Taibo y consiguió ampliar su ventaja con el ensayo de Moala.
No obstante, el cuadro portugés no se rindió y acortó distancias con un tiro a palos. Pero el equipo pucelano, que este año ha ganado todos los partidos salvo el primero (en la Supercopa ante el Recoletas Burgos), supo hacer valer la ventaja para hacerse con el título, el número 33 que llega a sus vitrinas, donde ya hay 12 campeonatos de liga División de Honor, 6 copas del Rey, 8 supercopas y 7 ibéricas.
Crónica del club
El VRAC nunca había ganado al Direito. - Foto: VRAC Quesos EntrepinaresTal como destaca el club quesero en su crónica, el Entrepinares se quita así la espina de la derrota en la final de la Supercopa, ganando su primer título de una temporada en la que los de Diego Merino, que firma unos números únicos en el rugby españolo como entrenador, mantienen opciones intactas de levantar otros dos, División de Honor y Copa del Rey, de los cuales es vigente campeón.
El partido fue lo que quiso el VRAC hasta los últimos cinco minutos, cuando la locura y la tensión se apoderaron de Monsanto, un campo que aprieta y que tiene un halo de sana encerrona. No es fácil ganar allí y eso multiplica el valor de lo logrado por un VRAC que tenía grabado a fuego la palabra más repetida durante la semana por Merino: actitud. Fue innegociable para los azulones desde el minuto 1 y hasta el 80, con una excelsa defensa que sólo concedió un ensayo, que minimizó los castigos todo lo que pudo, marca de la casa esta temporada, y que en ataque se fue soltando hasta llevar el duelo a su terreno en un momento clave.
Fue Baltazar Taibo el que inauguró el marcador en el minuto 9. Un premio que se antojaba escaso para el fulgurante arranque que había tenido el VRAC, que salió lanzado a por el triunfo y a demostrar a Direito que quería guerra. Mereció el ensayo en varias fases consecutivas que ahogaron a los portugueses, pero con esa falta de definición que viene siendo el talón de Aquiles del Entrepinares durante el presente curso. Duarte Portela respondió en el ecuador del primer tiempo en el que era el primer acercamiento con cierta relevancia de Direito, que estuvo fallón con el pie, impidiéndoles sumar seis puntos que podían haber cambiado el sino del encuentro. Hasta el descanso, el VRAC tuvo más iniciativa, pero el arreón final del Direito mereció cierto respeto.
Merino y Gavidi, con la séptima Ibérica. - Foto: VRAC Quesos EntrepinaresEn la segunda parte, con las piernas ya pesadas y los minutos pasando peaje físico, se mantuvo el equilibrio de fuerzas entre portugueses y españoles, con el VRAC oliendo sangre en todo momento. Manteniendo el buen nivel defensivo, las intentonas ofensivas se vieron recompensadas con tres puntos en otro castigo pasado por Balta en el minuto 50. Una amarilla a los locales animó todavía más a los castellanos, que fueron a por todas y ensayaron por medio de Moala tras hilvanar varias fases e irrumpir con fuerza y empuje en los últimos metros. Los minutos se consumieron entre cambios que daban oxígeno y un meticuloso orden del VRAC, que apenas cometía fallos. Llegado el minuto 70, y con 5-13 en el marcador, Direito apretó los dientes y se la jugó para meterse en la final. Con un castigo de fácil transformación situó el 8-13 a cinco minutos de un final no apto para cardiacos. El VRAC recuperó una de esas touches que en casi todas las finales gana cuando el oponente no puede fallar. Pero Direito también falló. Y tendría otra en la cometió un parcial condenatorio que puso en bandeja la séptima Taça a un VRAC que vuelve a ser el rey del rugby en la Península Ibérica.
Diego Merino
"Ha sido un partido muy duro", declaró el entrenador a su término. "El juego de Direito es el que hemos visto y lo sabíamos, con mucho juego al pie y sin necesitar balón para atacar, defendiendo y defendiendo. Hemos luchado los 80 minutos para sacar el partido adelante y nos ha servido para quitarnos una espina que teníamos contra Direito y nos llevamos otra Copa Ibérica a Valladolid".
Ficha técnica:
8 – GD Direito: David Costa, Duarte Diniz, António Prim, Manuel Picao, Duarte Torgal, Joao Vital, Joao Granate, Pedro Afra, Afonso Castiñeira, Jerónimo Portela, Joao Afra, José María Vareta, Francisco Nobre y Manuel Vareiro.
También jugaron: Guillermo Durán, Antonio Peixoto, Francisco Bruno, Guilherme Valente, Vasco Fragoso, Duarte Cortes, Tomás Cary y Joao Vaz.
13 – VRAC Quesos Entrepinares: Juan Ignacio Pérez, Pablo Miejimolle, Mauro Genco, KaloKalo Gavidi, Tiaki Fabish, Marc Sánchez, Ewart Potgieter, Siosiua Moala, Mauro Perotti, Javier López, Arnau Andrés, Baltazar Taibo, Martiniano Cian, Miguel Lainz y Llew Smith.
También jugaron: Raúl Calzón, Alberto Blanco, Gabriel Vélez, Álvaro Pírez, Manu Pérez y Álex Pérez.
Parciales: 0-3, min. 9: Puntapié de castigo de Baltazar Taibo; 5-3, min. 20: Ensayo de Duarte Portela; 5-6, min. 50: Puntapié de castigo de Baltazar Taibo; 5-13, min. 54: Ensayo de Siosiua Moala y transformación de Baltazar Taibo; 8-13, min. 75: Puntapié de castigo de Jerónimo Portela.
Árbitro: Pierre Bru (Francia). Amonestó a Duarte Diniz y Martiniano Cian.
Incidencias: Partido correspondiente a la final de la Copa Ibérica 2023 disputado en el Campo de Monsanto, Lisboa.