El Atlético de Madrid impulsó este domingo su octavo triunfo en las últimas nueve jornadas de LaLiga Santander en un margen de 19 minutos en el primer tiempo, con tres goles entre el 20 y el 39 y una demostración de pegada frente al Valladolid con la que insistió en la presión sobre la segunda posición del Real Madrid, a dos puntos, para obtener un triunfo sufrido, puesto en duda por la reacción de su oponente, pero sentenciado en el tramo final con un tanto en propia puerta y un golazo de Memphis Depay (2-5).

Primero Nahuel Molina en una acción profunda por la derecha, después José María Giménez con un cabezazo a centro de Antoine Griezmann y más tarde Álvaro Morata, autor del 0-3 a servicio también del internacional francés, marcaron la diferencia en ese momento del encuentro, reanimado con un penalti de Mario Hermoso transformado por Cyle Larin (1-3, m. 41) y agitado aún más con la ofensiva local en la segunda parte, informa EFE.

El 2-3 de Sergio Escudero en el 74 puso todo en aún más ebullición, aunque fue insuficiente para alterar el desenlace final del choque, con un penalti reclamado por mano de Saúl Ñíguez y con el 2-4 que consolidó el triunfo del conjunto rojiblanco en propia puerta de Joaquín, tras un pase atrás de Ángel Correa. Memphis Depay, ya en el tiempo añadido, anotó el 2-5.

El Atlético sigue tercero, a dos puntos del Real Madrid, segundo, después de haber perdido tan solo uno de sus últimos 16 encuentros ligueros; el Valladolid es decimoquinto, cuatro puntos por encima del descenso que marca el Espanyol.