La tradición de dejar un margen de cien días a los nuevos gobernantes antes de evaluar su gestión viene de la etapa del presidente estadounidense Franklin Delano Roosevelt, que a su vez se inspiró en Napoleón Bonaparte. Y desde entonces es una fecha simbólica que marca un margen de confianza para los recién llegados a los órganos de gobierno de las administraciones. Un límite que en el caso del alcalde de Valladolid se cumple el próximo lunes 25 de septiembre.
En este tiempo, Jesús Julio Carnero y su equipo de Gobierno, que conformó en coalición con Vox, han tenido que afrontar situaciones complejas, como la gestión de las dos explosiones de gas registradas este verano en la calle Goya y Juan de Valladolid, con dos víctimas mortales. Pero también han saboreado las mieles de unas fiestas patronales multitudinarias y sin incidentes y de una contrarreloj de la Vuelta a España en la capital, que la situó en las portadas de todos los medios de comunicación.
Asimismo, en este mandato se ha dado una situación extraordinaria, ya que solo un día después de celebrarse las elecciones municipales el presidente delGobierno convocó otras generales. Eso supuso que casi sin tiempo para constituir el nuevo Pleno, los partidos volvieron al fragor de la campaña política, con el propio regidor y el presidente de la oposición encabezando las listas de sus partidos al Senado y al Congreso. Un reto al que se sumó la también concejala del PP Mercedes Cantalapiedra y que hizo que tras el recuento de votos del 23-J los tres compartan bancanda en el Consistorio y en el Parlamento.
Eso ha motivado cambios en el funcionamiento municipal. Uno, que Carnero optó por dejar a la edil sin cartera para centrarse en la política nacional; otro es que Puente ha optado por ser presidente del grupo y dejar el papel de portavoz a Pedro Herrero y el tercero ha sido de carácter organizativo: tanto los plenos como la Junta Local de Gobierno se celebrarán ahora los lunes. Además, el primer edil ha decidido cambiar la estructura del gabinete de Alcaldía y crear una dirección de coordinación de políticas públicas. Un puesto de confianza que la oposición ha criticado y que será motivo de una moción en el pleno de septiembre.
Críticas.
De hecho, tanto los grupos municipales del PSOE como de Valladolid Toma la Palabra han ejercido desde el primer día una intensa labor de control de la gestión del equipo de Gobierno. Aunque el alcalde no tardó mucho tiempo en hacer un balance de la situación que se encontró en el Ayuntamiento tras los ocho años de gestión del socialista Óscar Puente en coalición con VTLP. Carnero hizo pública, a principios de julio, la que calificaba como «complicada» situación económica del Consistorio, sobre todo por el incremento del endeudamiento en 20 puntos en los últimos años, por lo que encargó un informe al interventor municipal, que todavía no se ha difundido. Una situación que hizo que matizara su compromiso de rebajar inmediatamente un 10% el tipo de gravamen del IBI y el coeficiente aplicado a las cuotas del Impuesto de Circulación de Vehículos (IVTM).
Una acusación que dio el pistoletazo de salida a la reclamación de los socialistas de su buena gestión y a la fiscalización de todas las medidas que se están aprobando, pero cuya tramitación o concesión, en el caso de los fondos europeos, deriva de su mandato.
Esto ha motivado una batalla comunicativa inusualmente intensa. En los cien primeros días, el gabinete de comunicación del Ayuntamiento ha generado más de cien notas informativas, pero los socialistas no se han quedado a la zaga. El alcalde ha multiplicado su presencia en actos públicos para evidenciar el 'cambio' en el sillón municipal e imponer su relato en temas como el de la movilidad y el soterramiento. Así, el primer día se anunció el decreto para eliminar los carriles bici de Isabel La Católica y la avenida de Gijón, además de los tramos de carril bus del puente de Poniente y López Gómez. Era un compromiso electoral, pero todavía está pendiente de una nueva ordenanza, que está en la fase final de su tramitación. Lo mismo sucede con el proyecto para desplazar el carril bici de Isabel La Católica sobre la actual acera y parte del parque, con un coste de unos dos millones de euros, pero todavía no se ha licitado. Y lo mismo sucede con la revisión de la zona de bajas emisiones (ZBE), que requiere de una nueva ordenanza para reducir su extensión. De momento, ha recibido más de 400 alegaciones.
En estos días se ha constituido la mesa del soterramiento, donde se han integrado distintas entidades, asociaciones, organizaciones sociales y empresariales, pero donde declinaron sentarse los grupos de la oposición. Además, el nuevo equipo de Gobierno ya ha participado en las primeras reuniones de la sociedad Valladolid Alta Velocidad (VAV), donde ha pedido una cita presencial para pedir tomar en consideración el proyecto del soterramiento, en el que tendría el apoyo de la Junta. Pero el alcalde no ha conseguido reunirse con la ministra de Transportes en funciones, Raquel Sánchez, para trasladarle su propuesta.
También tiene pendiente de resolver el proyecto de la Ciudad Deportiva, ya que su propuesta de reforma del estadio necesita de un nuevo convenio con el Real Valladolid. Eso implica modificar el que se iba a aprobar y supondrá unos meses de retraso.
'Legado'.
Por otra parte, Carnero aseguró en campaña que su cambio no implicaba deshacer las cosas que funcionan y parte de las satisfacciones le han venido de proyectos que ya estaban en marcha. El popular ya está al frente de las gestiones para acondicionar el recinto ferial y que Valladolid se convierta en capital del cine gracias a la gala de los Goya. De hecho, ya actuó como anfitrión de un gran evento en agosto, cuando la ciudad acogió la cumbre informal de ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea.
En estos poco más de tres meses también ha visto inaugurarse algunas infraestructuras importantes, como el paso peatonal de Labradores, que forma parte del proyecto de la integración. Su intención es que junto al de Padre Claret sean los únicos que vean la luz de la veintena de planes.
En el área de Movilidad se ha decidido ampliar el servicio del Biki al alfoz y se ha firmado ya un acuerdo con Zaratán, que se extenderá después a más localidades. Algo que también quiere hacer con Auvasa, aunque antes se tiene que nombrar al nuevo gerente de la empresa. Sí que se ha aplicado el cambio simbólico de recuperar el pago en efectivo en los autobuses.
En estos cien días también se ha confirmado la llegada de nuevos fondos europeos que servirán para ejecutar proyectos tan importantes como la rehabilitación del Teatro Lope de Vega o del convento de Las Catalinas, pero también para hacer más eficientes las diferentes instalaciones municipales.
| BALANCE DE LOS PORTAVOCES DE LOS GRUPOS POLÍTICOS CON REPRESENTACIÓN EN EL AYUNTAMIENTO |
BLANCA JIMÉNEZ PORTAVOZ DEL GRUPO MUNICIPAL POPULAR | «Trabajamos desde el primer día para cumplir el programa electoral» | La concejala de Turismo, Eventos y Marca de Ciudad y portavoz del grupo municipal del PP, Blanca Jiménez, apunta que cien días no son suficientes para poner en marcha los grandes proyectos, pero sí para demostrar las intenciones del equipo de Gobierno: «Trabajamos desde el primer día para cumplir nuestro programa». Así, subraya que ya se han iniciado los cambios en temas clave como la movilidad, con nuevas ordenanzas para modificar dos carriles bici y la zona de bajas emisiones, además de haber iniciado ya la tramitación para ampliar los carriles del Puente de Poniente. La dirigente conservadora compromete, además, que en los próximos meses se verán avances en los proyectos de calado que tiene en agenda el equipo de Gobierno. En este sentido, remarca la sintonía «perfecta» que hay en el pacto entre PP y Vox. «Somos un equipo, cuando estamos trabajando nos quitamos la chaqueta del partido y funcionamos en bloque». Y lamenta que las formaciones de la oposición no les hayan dado «ni 24 horas» de margen para evaluar su gestión. «Se entiende el papel de control, pero en este tiempo han sido especialmente injustos», apostilla. |
IRENE CARVAJAL PORTAVOZ DE VOX | «El engranaje del pacto funciona perfectamente, con diálogo y coordinación» | La primera teniente de alcalde, concejala de Cultura y portavoz de Vox, Irene Carvajal, valora muy positivamente los cien primeros días del pacto de Gobierno entre su partido y el PP. Recalca que comenzaron a trabajar desde el primer momento para poner en marcha los grandes proyectos, aunque matiza que los resultados se verán a largo plazo. «El engranaje funciona. No somos dos partidos, somos un equipo de Gobierno donde hay diálogo y coordinación», detalla. En este tiempo se estrenó como alcaldesa accidental y tuvo que gestionar la explosión de gas de la calle Goya, que dejó una víctima mortal. «Se nota que somos gestores y hemos sabido gestionar esta situación dramática», reitera. Y lo hace extensible a las decisiones que se van tomando, que parten de un presupuesto heredado, pero donde subraya que no se están limitando a seguir la inercia: «Hemos ido encajando nuestras propuestas». Asimismo, la portavoz de Vox mantiene que cumplirán las promesas electorales como la bajada de impuestos, aunque el alcalde haya dejado caer que sería a lo largo del mandato. «Nosotros cumplimos», reitera. |
ÓSCAR PUENTE PRESIDENTE DEL GRUPO MUNICIPAL SOCIALISTA | «Por lo que me dicen, la ciudad tiene la sensación de que el alcalde sigo siendo yo» | el exalcalde Óscar Puente, ahora jefe de la oposición, asegura que habla con conocimiento cuando asegura que el actual regidor «no solo no quería serlo, sino que se esfuerza todos los días en demostrarlo y ejerce a regañadientes». De hecho, pone como ejemplo la «pírrica» agenda que tiene y que, además, vaya a contratar a un director de Coordinación de Políticas Públicas para «desentenderse» de sus obligaciones. El socialista considera que los avances en proyectos importantes han sido nulos y sin embargo se han impuesto las actuaciones «regresivas» en las políticas de movilidad. Y destaca que se están tomando decisiones contradictorias como la extensión del servicio de Biki a Zaratán, que está conectado a la capital por el carril bici de la avenida de Gijón, que se va a suprimir. También subraya que del plan de choque de limpieza que se anunció como inmediato no se sabe nada y considera que incluso ha empeorado la situación. Finalmente, recalca que lo «único» positivo son los proyectos que ya estaban en marcha. «Por lo que me traslada la gente en la calle, la ciudad tiene la sensación de que el alcalde sigo siendo yo». |
ROCÍO ANGUITA PORTAVOZ VTLP | «El PP está muy escorado y también muy influenciado por sus socios de Gobierno» | La portavoz de Valladolid Toma la Palabra (VTLP), Rocío Anguita, que se estrena como edil, lamenta que el actual equipo de Gobierno quiera «destruir» las políticas de movilidad implantadas en el anterior mandato y asegura que, además, esos cambios le van a costar caro a la ciudad: «Todo esto refleja que el PP está muy escorado e influenciado por sus socios de Vox, lo que llevará a Valladolid a situaciones de hace muchos años». La concejala reitera que han intentado hacer una oposición eficaz, pero matiza que les resulta muy difícil. «Están cambiando muchas ordenanzas, pero no podemos saber exactamente el contenido porque solo nos informan de los enunciados. Eso dificulta las alegaciones y la participación ciudadana», indica la portavoz, que considera que este método se aplica para intentar mantener un «perfil bajo» y aplicar la agenda de Gobierno sin problema. Y pone el ejemplo del soterramiento, donde critica que no se haya presentado proyecto alguno y se pida la adhesión: «Se vende una idea, pero no hemos visto ni un solo papel». También critica que no están defendiendo los intereses de la capital ante la Junta. |