El Real Valladolid ha perdido el efecto Pezzolano. El técnico uruguayo trajo un soplo de aire fresco e hizo que el Pucela sumase 7 de los 9 primeros puntos. Pero, tras ellos, su equipo acumula tres derrotas consecutivas (Valencia, Atleti y la de este jueves ante el Rayo Vallecano), quedándose solo un punto por encima del descenso antes del parón de este fin de semana. Los blanquivioleta pagaron en Vallecas el cansancio físico de jugar cuatro partidos en dos semanas casi con los mismos. Salieron bien, tuvieron ocasiones, pero no acertaron. Y luego fueron apagándose con el paso de los minutos. Recibieron un gol nada más salir del descanso. De un ex, Raúl de Tomás, que aún no había anotado con el Rayo. Y no reaccionaron. Volvieron a encajar y solo fueron capaces de recortar tras un saque de esquina. Nada más. Y el descenso más cerca.

El técnico uruguayo introdujo dos cambios en el once, Javi Sánchez por Joaquín y Escudero por Fresneda. Y los suyos salieron a ganar. Avisando en el minuto 2, con un cabezazo de Larin que atrapó Dimitrievski, y un lanzamiento de falta, duro, de Monchu en el 8 a las manos del portero del Rayo.

El Pucela necesitaba la victoria y la buscó en el arranque. En el 10, tuvo una nueva ocasión, con un cabezazo de Escudero a saque de córner, que salió fuera por poco. Mandaba el cuadro vallisoletano en Vallecas.

Pero una acción aislada de Isi, con un lanzamiento lejano que hizo esforzarse a Masip, cambió la dinámica, haciendo al Rayo pasar a dominar. Con muchas jugadas entre líneas y una oportunidad de Álvaro García, que casi sorprende a Masip en el primer palo en el minuto 19.

Igualado el encuentro, lo peor fue la lesión de Luis Pérez, tras una entrada de Comesaña. Fue muscular y pidió rápidamente el cambio, entrando Fresneda (minuto 24). Los blanquivioleta, este jueves morados, quisieron el balón ante un conjunto presionante arriba. Poco a poco lo lograron, aunque con menos mordiente en ataque. Eso sí, con una nueva mano en el área rival no pitada. Esta vez de Raúl de Tomás. De nuevo sin señalizar ni por parte del colegiado ni del VAR. Y van...

El Real Valladolid perdió el punch inicial y cambió el sistema, adelantando a Hongla por delante de la defensa. Poco más pasó antes del descanso. Mucho atasco, pocos pases y menos llegadas.

Tras el descanso no dio tiempo para saber cómo empezaba el choque. Porque el Rayo aprovechó la apatía defensiva de los pucelanos para abrir el marcador en el minuto 47. Apatía por la llegada por banda izquierda de Álvaro Sánchez, permitiendo el centro sin oposición. Y más de los centrales, con solo De Tomás para el remate. El ex del Pucela no había marcado aún con el Rayo y lo hizo rematando solo de cabeza lejos de las opciones de Masip.

El jarro de agua fría pudo atenuarse en el 50. Un error de Mumin en un control hizo que el balón cayese franco en los pies de Larin, cuyo remate salió centrado e hizo lucirse a Dimitrievski. El canadiense lo volvió a intentar con el exterior, flojo y al centro de nuevo. 

La reacción parecía real. El Pucela volvía a mandar. Aunque el Rayo seguía mordiendo arriba, buscando el error. Y este aparecía en demasiadas ocasiones: en un pase entre los defensas, en un mal corte, en una falta en el centro del campo...

Los cambios pararon el ritmo. Uno, el de Javi Sánchez, por otra lesión. Aún quedaban 25 minutos. Mucho. Y al cuadro vallisoletano no le sentaron bien. Al menos en los primeros instantes. Parecía cansado el cuadro de Pezzolano. Y su rival tenía una marcha más.

No parecía. Era una realidad. Y se vio en el minuto 80, en una salida horrorosa desde atrás de Monchu, muy cansado. El regalo lo aprovechó Álvaro García, mucho más rápido, que regaló el gol de Camello. El delantero remató mal, pero suficiente para hacer el segundo.

El Real Valladolid estaba tocado. Parecía hundido. Pero un saque de esquina en el 83 le hizo meterse de nuevo en el encuentro. Sergio León remató de cabeza a la perfección para colocar el 2-1. Fue un espejismo.

No se volvió a ver al Pucela cerca del área rival. Para un equipo que se jugaba mucho más que el rival resulta extraño. El cansancio puede que hiciese efecto. Pero parecía que el que necesitaba los puntos era el Rayo, que acabó en el campo blanquivioleta.

Quedan cinco jornadas. Cinco finales. Y le toca a Pezzolano volver a levantar a los suyos.

Ficha técnica:

2 - Rayo Vallecano: Dimitrievski; Balliu, Catena, Mumin, Fran García; Comesaña (Pathé Ciss, m.82), Valentín; Isi (Chavarría, m.88), Trejo (Unai López, m.67), Álvaro (Salvi, m.88); y Raúl de Tomás (Camello, m.67).

1 - Real Valladolid: Masip; Luis Pérez (Fresneda, m.25), Javi Sánchez (Kenedy, m.66), El Yamiq, Hongla, Escudero; Monchu, Aguado (Roque Mesa, m.66), Kike Pérez (Sergio León, m.59); Gonzalo Plata (Iván Sánchez, m.59) y Larin.

Goles: 1-0: M.47 Raúl de Tomás; 2-0: M.80 Camello; 2-1: M.83 Sergio León.

Árbitro: Díaz de Mera (Comité Castilla-La Mancha). Sin amonestaciones.

Incidencias: partido correspondiente a la jornada 33 de la Liga Santander, disputado en el estadio de Vallecas ante 11.171 espectadores.