El tiempo y el amor al trabajo: el secreto de Vega Sicilia

R.G.R
-

El escritor y periodista Alfonso Armada descubre en un libro la historia y las claves del éxito de la mítica bodega

Bodega Vega Sicilia.

El escritor y periodista Alfonso Armada (Vigo, 1958) presentó esta tarde en Valladolid 'El misterio de Vega Sicilia' (La Fábrica), una obra escrita a modo de novela de viajes e ilustrada con unos impactantes retratos de Luis de las Alas, en la que hace un apasionante recorrido a través de conversaciones y entrevistas con las figuras indispensables que hacen de este vino un mito mundial: desde los propietarios hasta los tractoristas, pasando por los bodegueros, los técnicos, los toneleros, los administrativos, los trasegadores, los podadores o los vendimiadores...

En declaraciones a Ical antes de la presentación, Armada reconoció que este libro surgió por encargo. Fue una propuesta de Vega Sicilia para conmemorar los 40 años de la compra de la bodega por parte de la familia Álvarez, en el que también se pretendía también recordar la historia de la bodega desde su fundación. La propuesta llegó a manos del periodista Pedro García Cuartango, pero él no podía y le pasó al CEO de Tempos Vega Sicilia, Pablo Álvarez, el contacto de Armada. "El libro me cayó del cielo. Ni conocía el mundo del vino, ni sabía mucho de Vega Sicilia. Fue algo inesperado", reconoció.

En la obra, Armada sigue la candencia de sus propios descubrimientos, desde la finca del Ontañón y las viñas traídas de Francia en el siglo XIX, "donde surgió todo con Único y Valbuena", pasando por Alión, bodega que nació en la Ribera del Duero al calor de Vega Sicilia. Su viajé continúa por Toro (Zamora), donde bajo el paraguas de Tempo Vega Sicilia se elabora Pintia; por La Rioja, denominación en la que junto a la familia Rothschild nació Macán; por Galicia, donde a partir del próximo año se comercializará Deiva (Albariño) para finalizar en Hungría, donde David Álvarez, tras la caída del comunismo, compró unas bodegas donde se hacía el famoso vino de Tokaj.

Presentación del libro. Presentación del libro. - Foto: Leticia Prez ICAL

Armada tiene claro que la esencia de Vega Sicilia es el tiempo y el compromiso. Tanto el que dedica a cultivar las cepas y a envejecer el vino, así como la ejemplar relación que mantiene con sus trabajadores, dado que hasta tres y cuatro generaciones de familias llevan trabajando ininterrumpidamente en la bodega. Además, reconoce que desde al igual que desde el principio de la obra Luis de las Alas quería retratar a los trabajadores que hacen posible todo el proceso, él también quería contar la vida de las personas que están detrás de este gran vino. "El vino es una cuestión de tiempo y de cuidado, pero en el caso de Vega Sicilia se ha logrado hacer partícipes a todos sus trabajadores de algo más grande que uno mismo", aseveró.

Pero junto con la paciencia y el compromiso, la otra clave del éxito de Vega Sicilia ha sido la cultura empresarial que ha sabido crear Pablo Álvarez. Armada se muestra convencido de que el producto final de cualquier trabajo es mucho mejor cuando los empleados son felices, a la vez que confiesa que en las grandes empresas de comunicación en las que ha trabajado siempre he echado de menos "el amor al trabajo bien hecho". Así, explicó que el culto a la excelencia de Vega Sicilia pasa por "trabajar despacio, por no estresar ni al trabajador ni al vino y por no tomar ningún atajo".

El autor también apunta que aunque la bodega ya había cosechado grandes premios internacionales en los años 20 y 30, desde la compra por parte de la familia Álvarez ha experimentado un gran proceso de consolidación internacional, ya que ha pasado de exportar vino a tres países a estar presente en 150. Además, se trata de una empresa que no necesita publicidad, dado que antes de cosecharlo casi todo su vino está vendido, como demuestra los "míticos cupos que pasan de padres a hijos".

'In vino veritas'

Este periodista, que cubrió el cerco de Sarajevo (1992-1996) o el genocidio de Ruanda (1994) y que también fue corresponsal para África en El País y enviado especial en Nueva York para ABC, destacó que además de en la cultura mediterránea y la civilización judeocristina, el vino está muy presente también en la cultura persa, tanto antes como después de la llegada del Islam. Según explicó, el cuidado y el amor por el vino forma parte de la tradición de los poetas clásicos, motivo por el que en el libro hace referencia al poeta persa Omar Yayam (1048-1131), pero también a Horacio, que mil años antes "ya sintió la misma fascinación por el vino".

En este sentido, Armada no olvida el proverbio latino 'in vino veritas' -en el vino está la verdad-, que deja claro que "el vino nos suelta la lengua y aparta las limitaciones que la razón y la conciencia muchas veces nos imponen".

Por último, el autor reconoce que se trata de un libro comprensible para cualquier persona que ame la naturaleza y el vino, motivo por el que además de clásicos como Omar Yayam, Virgilio, Horacio o Lucrecio, también se hace referencia a escritores como Miguel Delibes o Jiménez Lozano, "ya me ayudaron a leer mejor la tierra y a disfrutar del vino".