Se avecinan cambios en la Diputación de Valladolid. Al menos cinco diputados de los 27 no repetirán el próximo mandato al no estar presentes en las candidaturas de sus respectivos municipios. Cabe recordar que la condición para ocupar un escaño en la institución provincial es ser concejal, algo que resulta imposible si no ocupan un puesto en las listas de sus partidos. 

El principal problema lo tienen, una vez más, en Ciudadanos. Tanto la vicepresidenta, Gema Gómez, como la diputada de área, Nuria Duque, no están presentes en ninguna lista, lo que significa que todo el grupo abandonará la institución en el próximo mandato. En el caso de que obtenga representación, Ciudadanos tendrá que designar a nuevas personas que empiecen de cero en la institución provincial.

El representante de Toma la Palabra, Marcos Díez, tampoco podrá optar a ocupar una silla en Diputación. No concurre bajo el paraguas de la coalición Toma la Palabra, sino que lo hace por Izquierda Unida, lo que imposibilita que tenga los votos suficientes en La Cistérniga (donde se presenta) para obtener un diputado. 

Raquel González Caballero, exalcaldesa de Renedo, sí va en listas, en Robladillo, como 'cunera'. A pesar de que puede ser elegida concejal, tiene escasas posibilidades de continuar en la institución. Y, por último, el actual regidor de Santervás de Campos, Santiago Baeza, que este mandato se ha encargado del complicado servicio de bomberos en la institución, pero ha decidido dejar el cargo.