Máxima rivalidad regional en el José Zorrilla

D.V.
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Un Real Valladolid en racha recibe a un Burgos en buena dinámica con el objetivo de sumar tres puntos más y derrotar a un 'enemigo tradicional'

Dos jugadores, durante un entrenamiento. - Foto: Real Valladolid

Real Valladolid y Burgos afrontan este domingo (18.30 horas) un partido de rivalidad regional en Zorrilla con ambos equipos en buena línea en los últimos partidos y empatados a puntos en la clasificación, por lo que se presenta un partido igualado, a priori.

Los vallisoletanos llegan a esta cita tras haber sumado dos victorias en las últimas jornadas, lo que ha aportado "más confianza y seguridad" a la plantilla, "cuyo trabajo diario, entrega y rebeldía está siendo impresionante", según ha destacado su técnico, Paulo Pezzolano.

Este se ha mostrado satisfecho con la evolución de su equipo, aunque es consciente de que es necesario "ser más contundentes, más protagonistas con el balón y seguir aumentando la solidez defensiva, para controlar más tiempo el juego y tener más opciones de ataque".

Puesto que no quiere dar pistas al rival, no ha desvelado si volverá a apostar por una línea defensiva de cinco -que cambiaría si entra Gustavo Henrique- o la dejará en cuatro, ya que con esta formación "también se están empezando a encontrar cómodos los jugadores, y aporta otras alternativas", ha comentado el técnico uruguayo.

De hecho, ha avanzado la opción de "situar a David Torres de lateral izquierdo y a Escudero en una posición más adelantada", pero lo lógico es que dé continuidad a lo que está dando resultados positivos, y plantee, de inicio, el mismo esquema de cinco en su área.

Sabe que el Burgos "maneja los balones largos; es agresivo en la segunda bola en medio del campo; tiene volumen de juego si el rival se estira mucho; centros delanteros altos; ocupan bien el área y saben aprovechar las jugadas a balón parado".

"Es un equipo agresivo, en el que se cierran los extremos y van rápidos los volantes en la segunda bola", ha añadido, aunque lo que considera más relevante es que sus jugadores "tengan confianza y sigan creciendo", con esa mayor solidez en defensa, a lo que debería añadirse más productividad en ataque.

Por su parte, el conjunto blanquinegro estará apoyado por cientos de aficionados que tratarán de hacer llegar ese ambiente especial que se vive cada 15 días en el Plantío a un estadio que no es el suyo.

Tras el 4-0 de la jornada anterior, el equipo burgalés quiere intentar sumar tres puntos como visitante en un estadio que el técnico Jon Pérez Bolo, considera "el mejor escenario" para hacerlo.

Sobre el Valladolid, señaló que "es un equipo que no ha empezado bien pero que poco a poco ha recuperado buenas sensaciones, buen juego y resultados que le han llevado a estar en una zona media de la tabla".

"El fútbol es caprichoso y no siempre se consiguen los objetivos desde el principio", apuntó Bolo, quién espera "un partido complicado".

A sus jugadores les pide "ser valientes, atrevido, tener concentración e intensidad" y tratar de hacer "el mismo partido en el Plantío que fuera".

Para este encuentro, Bolo volverá a contar con Unai Elgezabal, que ya ha entrenado con el grupo y espera que pueda ser de la partida este domingo, sin embargo no estará griego sierra que sigue recuperándose de su lesión por lo que la convocatoria se completará con jugadores del filial.

El partido ha sido designado como partido de alto riesgo, por lo que se incrementará la vigilancia en el estadio, para garantizar el buen desarrollo del juego.

Alineaciones probables

Real Valladolid: John; Luis Pérez, Boyomo, David Torres, Gustavo Henrique, Escudero; Monchu, Juric, Iván Sánchez; Kenedy, Marcos André.

Burgos: Caro; Navarro, Córdoba, Elgezabal, Matos, Dani Ojeda, Atienza, Mumo, Ander Martín, Fer Niño, Curro.

Árbitro: José Antonio López Toca (Comité cántabro).

Estadio: José Zorrilla.

Horario: 18.30 horas.