?Un informe de la Cátedra de Innovación de la Universidad de Valladolid pone de manifiesto que las funciones que actualmente se llevan a cabo por parte de la Sociedad Provincial de Desarrollo de Valladolid S.A. (Sodeva) podrían ser asumidas por la propia Diputación. Refleja que Sodeva sería perfectamente prescindible. Es más, en sus conclusiones, el estudio indica que existe una «dirección directa o indirecta intensa» por parte del Gobierno de la institución de la sociedad, al punto que «se rige más por objetivos políticos que por indicadores de eficiencia». Asegura que las sociedades públicas «no despliegan su teórico potencial» cuando trabajan de una forma supervisada. 

El documento también asegura que Sodeva no es a día de hoy «tan flexible e innovadora» como en el momento de su constitución, con las ventajas fiscales de deducción de IVA y la bonificación del impuesto sobre sociedades, que debido a  los nuevos criterios de la Agencia Tributaria y la Dirección General de Tributos van en la dirección «de no permitir» la deducibilidad de las cuotas soportadas.

Entiende que el mantenimiento de la sociedad «solo tiene verdadero sentido» cuando es autónoma en su gestión, pero no dando cuenta de sus resultados a la Diputación.

El informe también comenta lo relevante de los procedimientos de selección del contratista, donde tradicional y comparativamente «el derecho privado ofrece más agilidad». «No se puede hablar de una mayor flexibilidad contractual de las sociedades mercantiles», indica el documento.  

La Cátedra de la Universidad pone de manifiesto que en aquellos casos en los que la Diputación opte por la gestión directa de servicios o actividades determinadas tendrá que justificar por qué los lleva a cabo a través de sus propios medios. 

El estudio elaborado por la Universidad pone así en entredicho la necesidad de que la sociedad de desarrollo siga funcionando y se decanta más, sin decirlo explícitamente, por una posible disolución de la sociedad. En este sentido, cabe recordar que la propia Diputación anunció en el mes de diciembre que Sodeva se trasformaba en Avanza, un nuevo nombre y un nuevo logo, como el arranque de una serie de modificaciones hasta el nombramiento de un nuevo director. 

Los grupos políticos de la oposición han repetido la necesidad de que Sodeva termine desapareciendo. «Sodeva no cumple ninguno de los criterios al no tener una autonomía en su gestión que le permita innovar en su funcionamiento y tener unos resultados económicos ruinosos muy alejados de la eficiencia que se busca con su creación», asegura el portavoz de Toma la Palabra, Marcos Díez.