La Audiencia de Valladolid ha condenado este lunes a un año y medio de cárcel a un varón, cuya identidad responde a las iniciales D.M.E, que en julio de 2018 fue interceptado en un control de la Guardia Civil cuando ocupaba un turismo y portaba, oculta en los testículos, una bolsa con más de 7 gramos de heroína.

El juicio, previsto en la Sección Cuarta de lo Penal de la Audiencia de Valladolid, no ha llegado a celebrarse debido al acuerdo alcanzado entre el acusado y el Ministerio Fiscal, consistente en una multa de 360 euros por delito de resistencia y un año y medio de cárcel y otros 600 euros de sanción por delito contra la salud pública, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

Al acusado se le ha apreciado la atenuante analógica de drogadicción, ya que sufre un trastorno por policonsumo de tóxicos de larga duración de cannabis, heroína y cocaína.

La petición inicial de la acusación pública consistía en seis meses de cárcel por el primer delito y otros cuatro años de privación de libertad y 1.500 euros de multa por el delito de tráfico de drogas.

Los hechos, con sentencia ya firme, se remontan al 6 de julio de 2018 cuando el condenado iba de copiloto en un Seat Córdoba que fue interceptado por la Guardia Civil en un control rutinario montado a la altura del kilómetro 130 de la A-62.

En el momento de la identificación, D.M.E. mostró una actitud defensiva y agresiva, ante lo que fue requerido por los agentes para que se tranquilizara y colaborase. Fue entonces cuando se metió la mano en los testículos y lanzó a la vía una bolsa de color blanco, con 7,29 gramos brutos de heroína, tras lo cual comenzó a forcejear con los guardias.

También se le ocuparon entonces, en un cacheo integral, 1,23 gramos brutos de resina de cannabis. La heroína intervenida podría haber alcanzado un valor de 730 euros y la resina de cannabis 5,52 euros.