A por la undécima... lejos de Pepe Rojo

M.B
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El VRAC Quesos Entrepinares buscará su primer título liguero fuera de Valladolid. Ganó como visitante dos veces pero jugando ante El Salvador. Este domingo lo intentará en Alcobendas

Imagen de archivo de un partido entre vallisoletanos y madrileños. - Foto: Jean François Sánchez (FER)

El VRAC Quesos Entrepinares buscará alzarse con su undécimo título liguero este domingo. Lo hará, por primera vez desde que se instauraron los playoff, jugando como visitante lejos de su Pepe Rojo y de Valladolid. Porque este domingo (12.30 horas) le espera el Lexus Alcobendas en Las Terrazas. 

Eso sí, no será la primera vez que juegue una gran final liguera como visitante, ya que ya lo hizo en las temporada 2016-17 y 2018-19, pero esos dos su rival era el SilverStorm El Salvador, con lo que sendos partidos se jugaron en Pepe Rojo. El resto, salvo el pasado curso por la pandemia, las ha disputado como local al acabar primero siempre en la fase regular. De hecho, desde la implantación del playoff, en la temporada 2011-12, el VRACha estado en todas las finales que se han jugado. 

La de la Liga de División de Honor de esta 2020-21 será inédita. Medirá a un Alcobendas que cuenta con un título en su palmarés, el de 2002; contra un VRAC que suma diez, incluidos los cuatro últimos.

Aunque, como dato diferenciador, esta vez el favorito no es el campeón sino el aspirante a hacerse con el trono.

Los granates vencieron en semifinales al Barça Rugbi después de superar los cuartos de final con cierta polémica, al darles la Federación por ganadores por casos de covid en la plantilla de su rival, Ciencias. No es favorito por esos dos triunfos. Lo es por los anteriores, sobre todo los dos que les midieron a los vallisoletanos. Alcobendas se impuso en enero en Pepe Rojo al VRAC por 19-20, dejándole además fuera de la Copa del Rey, y repitió en abril en Las Terrazas por 33-11.

El argentino Luciano Perotti , con 12 ensayos; y el pie de Javi López, con 174 puntos anotados, son los principales peligros en ataque de los madrileños, que tienen a varios conocidos de la afición pucelana, como Santi Ovejero en la primera línea;o el ya internacional Matthew Foulds, exchamizo. Todos ellos bajo la batuta del Tiki Inchausti .

Pero el VRAC quiere romper las quinielas y volver a mandar en la competición doméstica. Sufrió en los cuartos de final ante Cisneros y de nuevo lo pasó mal en las semifinales de la pasada semana ante El Salvador. No estuvo fino en ninguno de los dos encuentros pero superó ambos, casi sobre la bocina, en los tramos finales, mostrando ese gen ganador que le ha llevado a diez Ligas.

Diego Merino tendrá bajas. Las conocidas por lesión de José Díaz, Peisi, Alberto Blanco, Alberto Pisulla y Álvaro Ferrández, aunque recuperará a Coque Ortiz. «¿Favorito? Alcobendas, tal y como van las cosas, sí. Ponernos nosotros no sería real», reconoce el técnico que asegura que a pesar de que hayan cambiado las circunstancias, «no está todo dicho».

Desde que dirige al VRACha estado en todas las finales y sabe cuáles son las claves: «Ante El Salvador tuvimos que aumentar el rendimiento en fases estáticas. Alcobendas domina la melé, touch-maul y comete pocas indisciplinas. Esperamos dar mejora imagen que en semis y en los cuartos». Y pone el acento en lo que debe primar en los suyos:«La experiencia debe jugar a nuestro favor. Ahí debemos imponernos».