La consejera de Sanidad de Castilla y León, Verónica Casado, ha pedido un incremento del presupuesto para su departamento hasta llegar al 7 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de la Comunidad y mejorar la financiación autonómica que permita cubrir de manera adecuada el coste de los servicios sanitarios, que es mayor dadas las características de la región. 

Casado, que se ha vacunado contra la gripe en el Centro de Salud de Parquesol de Valladolid, ha recordado que la sanidad de Castilla y León tiene un déficit de 830 millones y sería necesario subir hasta una cantidad equivalente al 7 por ciento del PIB el entorno del 6 por ciento que representa ahora, para lo que considera que habrá que hacer los cálculos. 

La consejera ha asegurado que en España la sanidad que se tiene "es un Ferrari", con unas prestaciones altísimas y muy importantes, a diferencia de otros países, y que llega a todos los puntos de la Comunidad, pero ha incidido en la necesidad de mejorar la financiación. 

Así, ha reivindicado una mejora de la financiación autonómica pero que no sólo tenga en cuenta por personas atendidas porque el problema de Castilla y León es su extensión y dispersión, lo que supone que llegar a todos los rincones encarece el coste de la prestación de servicios.