Dos sesiones y Jorge García Vega ya es uno más en el engranaje del Cuatro Rayas Valladolid. El central berciano será mañana de la partida en el trascendental choque ante el Quabit Guadalajara, en la primera de las ‘finales’ del conjunto pucelano de aquí al final de la Liga. Los manchegos, dirigidos por Mateo Garralda, se encuentran cuatro puntos por encima de los entrenados por Juan Carlos Pastor.

De ahí que se catalogue de final el choque de mañana. Aunque, como decía el propio Pastor en la presentación de Vega, todos los partidos son finales desde la derrota en la primera jornada ante el Villa de Aranda. Un triunfo mañana, y por más de dos goles (en la primera vuelta, el Cuatro Rayas cayó por 31-29 en Guadalajara) metería de lleno en la pelea por evitar el descenso a los alcarreños. Para ello, Pastor contará con el último fichaje, un central que en las dos sesiones de entrenamiento ya ha demostrado que lleva mucho balonmano en sus venas a pesar de estar desde junio del año pasado alejado de la competición.

«Todo lo que sea ayudar está muy bien, estamos contentos con su llegada», señalaba ayer el joven central César Pérez en Onda Cero sobre el fichaje de Vega: «Por suerte, al haber estado con Jota, sabe el sistema y solo es recordarlo».

En su caso, ahora compartirá puesto con un jugador curtido en mil y una batallas: «Aportará su veteranía y experiencia. Y aprenderemos también de él».

César Pérez no se olvidó de avisar del peligro del rival de mañana: «Es un equipo bastante fuerte y compensando. Lo demostró ante el Naturhouse».