Las rutas con menos de 4.500 viajeros al año serán a demanda

SPC
-

Fomento traza las coordenadas del mapa de ordenación del transporte de Castilla y León que se debe aprobar por decreto antes de julio de 2020, un año después de la entrada en vigor de la ley

Un vecino de Aguilar de Campos (Valladolid) baja del autobús que realiza el transporte a la demanda hasta Medina de Rioseco - Foto: Jonatan Tajes

El transporte a la demanda tendrá un papel «preponderante» y se potenciará respecto a las líneas convencionales, por lo que se incrementará en un 78 por ciento su cobertura, de forma que asumirá el 50 por ciento de la oferta total en la Comunidad, con 15,2 millones de vehículos por kilómetro al año. Así, se prevé que en términos de demanda, mueva más de 1,7 millones de viajeros anuales.

De esta forma, las rutas de transporte regular cuya demanda sea inferior a 4.500 viajeros al año pasarán a ser prestadas como rutas de transporte a la demanda. Ésta es una de las características principales del nuevo modelo que se asentará sobre el mapa de ordenación del transporte, que ya diseña la Consejería de Fomento y Medio Ambiente y se aprobará por decreto antes de julio de 2020, con el objetivo final de garantizar un acceso universal en Castilla y León.

El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, y el director general de Transportes, Ignacio Santos, presentaron ayer las bases del mapa, cuya elaboración establece durante el plazo de un año la Ley de Transporte público de viajeros por carretera de Castilla y León, que se aprobó en diciembre de 2018 y entrará en vigor en julio de este año.

En ese sentido, Suárez-Quiñones subrayó como principal característica del modelo, que comienza a iniciar su desarrollo, con la nueva normativa, el mapa y los proyectos de explotación, la accesibilidad universal, puesto que trata de dar servicio a los núcleos de población a los que no llega todavía. El actual sistema caduca este año, por lo que la Junta, dijo, trabaja para dar los pasos necesarios para que el próximo ejecutivo complete su implantación, lo que permitirá al transporte dar una respuesta a la sociedad actual de la Comunidad.

Propuesta

El primer principio del mapa es la cobertura total de la población con especial atención a las necesidades de movilidad del mundo rural. Además, la modalidad de explotación incluye contratos zonales, potenciará la prestación del transporte a la demanda frente al regular general convencional y el transporte escolar pasará a estar integrado dentro de las nuevas concesiones. No obstante, se busca garantizar el mantenimiento del tejido empresarial y el volumen actual de empleo.

Con esta fórmula, habrá un menor número de concesiones, pasando de 148 y 77 autorizaciones especiales a 80 en la Comunidad.

El nuevo sistema contempla la conexión de núcleos de población con el nodo poblacional de influencia rural o con el municipio del área funcional estable, ya tenga o no proximidad, así como entre zonas de influencia socioeconómica, polos industriales y áreas funcionales estables y con las líneas estatales y otros modos de transporte.

Asimismo, el transporte escolar se integrará en su totalidad con el regular, de manera funcional, operativa, formal y económica. Por otra parte, la gestión del servicio regular será a través de una autoridad única del transporte y se crearán entes supralocales de coordinación con los ayuntamientos.

Los objetivos también contemplan la contratación pública estratégica, en la que se tendrán en cuenta criterios cualitativos, cláusulas sociales y medioambientales en la adjudicación y ejecución de contratos y subrogación laboral pactada con los agentes sociales, según informa Ical.

Por último, los nuevos servicios se prestarán con una flota de vehículos más moderna, eficiente y adaptada, dotada con los principales avances en sistemas inteligentes de transporte y seguridad.

Hasta julio de 2020

Una vez que el consejero de Fomento presentó ayer las bases, el Mapa de Ordenación del Transporte debe estar aprobado antes del 3 de julio de 2020, un año después de la entrada en vigor de la nueva ley del transporte de viajeros por carretera, y con la suficiente antelación para que se puedan cumplir los plazos para licitar los nuevos contratos. Posteriormente se tramitarán los proyectos de explotación que deberán ser sometidos a la máxima participación social e información pública para su aprobación como proyectos.

Sobre la base de los mencionados proyectos de explotación aprobados, la Consejería de Fomento deberá redactar los correspondientes pliegos de cláusulas administrativas particulares y prescripciones técnicas que habrán de regir la licitación de los futuros contratos de concesión de servicio público de las diferentes rutas de transporte.