Tiene todo para ser un gran equipo. Jugadores con muchas ganas de fútbol, que se entrenan dos veces a la semana, un míster que ha tenido que dejar fuera de la lista a otros, y una afición que les sigue a los partidos y con la que comparten el tercer tiempo. 

El Club Duero, de la Fundación Intras, ha iniciado así su participación en la última fase de la Liga Recoletas de fútbol 7 para empresas de la Fundación Eusebio Sacristán, el Torneo Clausura, y sus integrantes ya piensan en su segundo partido con una idea en la cabeza, disfrutar. Lo cuenta el responsable de este club, Javier Cano, a través de los sentimientos de uno de los jugadores. «Me dijo antes del primer partido que se sentía como cuando tenía 11 años, con esa emoción y esos nervios por jugar, por la competición. Eso me llegó al alma», explica. 

Son ya veteranos en esta competición, y en su tercera temporada están, como en las anteriores, encantados con la experiencia. «Hemos conseguido crear un espacio donde cabe mucha gente, usuarios de Intras, profesionales que trabajamos con ellos, amigos de la ambos, y nuestros seguidores. Somos un grupo muy interesante», añade Cano.

Los resultados nos para ellos tan importantes, pero sí lo es la competición.

«En nuestro primer partido, con La Casa de la Sepia y el Pulpo, estuvimos la primera parte muy igualados, y esa sensación de luchar en igualdad de condiciones, de tú a tú, en un ambiente normalizado es muy beneficiosa para nuestros chicos y chicas». Frente a eso el marcador poco importa.

Además han comprobado en su debut en la Liga que están mucho mejor físicamente que la temporada pasada, lo que ayuda a salir al campo con ganas de jugar y de disfrutar. Y con la cabeza bien alta, igual que los 40 equipos restantes de la Liga Recoletas.