Miguel Velasco es hombre de rugby. Primero como jugador y entrenador de su club de toda la vida, el VRAC;y desde la anterior década con las selecciones españoles. Desde 2013 es el segundo de Santiago Santos en la absoluta, el conocido como XV del León, que la pasada semana volvió a lograr el subcampeonato europeo (tercero en los últimos años). Además dirige a los sub 20 y vive el deporte del oval en primera persona.

¿Qué significa volver a colgarse la plata europea por segundo año consecutivo?

En los últimos 20 años, nos movíamos en la Tercera o en la cola de Segunda, en el Seis Naciones B o C. Ahora ya estamos empezando a estar arriba del Seis Naciones B; y tocar el techo sería quedar primero. Creo que esto es la confirmación definitiva de que el rugby español ha dado un paso adelante.

¿El techo es esa primera plaza?

Primero porque no se puede subir. El Seis Naciones A es como una empresa o negocio, no tenemos derecho a entrar. En el rugby, nosotros nos hemos movido entre el 16 y el 18º en la clasificación Mundial; y por poner un ejemplo, el 14º es Italia que tiene 25 millones de presupuesto. ¿Nosotros? Quizá 1 o 2. Hay un techo muy lejano, pero para ello el rugby debería ser más mediático o de masas, las empresas deberían invertir... estamos muy lejos, es un tema más global que deportivo.

¿Qué le espera ahora a la selección, cuál es el camino a recorrer para ese objetivo que todos quieren, el Mundial de Francia 2023?

Ahora llego todo lo gordo. El calendario aprobado, que no es firme, dice que empezamos en marzo, contra Rusia en Madrid, luego ante Rumanía en Bucarest y Portugal en Lisboa. A primeros de julio Georgia, en Madrid; y Bélgica, quizá en Bruselas. La primera vuelta del Campeonato se juega este año y la segunda el próximo. Georgia es el claro favorito, ha ganado 8 títulos en los últimos 10 años. Está al nivel de Italia. Luego Rusia, Rumanía, Portugal y nosotros, en las mismas condiciones para quedar segundos.

El primero y el segundo van directos al Mundial, y el tercero jugaría repesca. Está difícil, pero hay posibilidades por lo demostrado los últimos años.

¿Aún recuerda el fiasco en Bélgica (España perdió 18-10 en un polémico partido y luego fue sancionada) que les dejó sin Mundial?

Estamos con toda la ilusión del mundo, hay un gran ambiente en el equipo y estoy seguro de que no nos afectará para la clasificación. Pero que hay un poso para toda la vida... por supuesto.

¿Cuántos jugadores maneja ahora mismo el cuerpo técnico de la selección?

Más de medio centenar, entre 60 y 65. Aunque, con opciones reales de entrar en las convocatorias finales, me iría a 45-50.

Siempre se polemiza con el número de asimilados o franceses...

Ahora mismo tenemos tres fuentes de las que nos nutrimos: jugadores españoles, jugadores que han venido a España a clubes de la Liga, que han estado más de tres años y que cumplen con una serie de normas; y jugadores de padres o abuelos españoles, generalmente franceses. Los que más aportan son españoles y franceses.

En el último partido ante Portugal, entre los titulares, hubo siete españoles.

¿Y Valladolid? ¿VRAC y El Salvador siguen trabajando bien la cantera y teniendo internacionales?

En la última cita hubo dos del VRAC y tienen más con opciones, como Alonso y alguno más. De El Salvador estuvieron Del Hoyo y Víctor y tiene alguno más, Alvarado, Fitton... En Valladolid, los clubes trabajan serios y con muy buenos jugadores.

¿Piensa o ve posible el rugby a XV en unos Juegos?

Ese camino o lucha no está en la agenda de nadie, porque el rugby internacional funciona muy bien. No hace falta. El Seven se adapta mejor a unos Juegos. El Mundial ya es un espectáculo increíble. Queda bien como está. 

Sí se tendría que luchar por abrir el rugby a más países; para que tuviésemos más opciones de estar en la elite. Ahora es un mundo pensado para la elite y ninguna norma se adapta para acortar esas diferencias.

¿Y eso de que coincida un partido de la selección con una jornada liguera?

En las Ligas tops no lo sé. En la española, además de que los jugadores no son profesionales, hace años nos quejábamos, como clubes, que se paraba mucho la competición, incluso dos meses; y no se podía seguir la Liga. Para mí este sistema, aunque coincida, es más fácil de seguir. Me gusta más este formato, es más atractivo para la Liga.