El término gacela procede de la palabra persa Ghazal, cuyo significado es «elegante y rápida». Estos antílopes pueden alcanzar velocidades de más de 80 kilómetros por hora y tardan muy poco tiempo en llegar a su velocidad punta. Así, en el ámbito económico se conoce como empresas ‘gacela’ a aquellas de nueva creación que son capaces de alcanzar un nivel de crecimiento muy elevado, impropio de las compañías jóvenes. La empresa Iberinform Crédito y Caución ha elaborado un informe sobre el volumen de empresas ‘gacela’ que hay en España, entendiendo como tales las que tienen menos de cinco años de vida y, pese a ello, han logrado generar más de diez empleos y facturar por encima del medio millón de euros acumulando crecimientos anuales superiores al 20 por ciento en los tres últimos ejercicios.
El resultado es que hay 834 firmas que cumplen con este patrón, cuatro de las cuales están ubicadas en Valladolid, dos de tamaño medio y dos pequeñas. El estudio ha analizado el nivel de crecimiento de la facturación entre 2015 y 2018, y la que sale mejor paradas entre las vallisoletanas es D-Zero Construcciones, con un aumento del 687 por ciento. Esta empresa de construcción se creó en 2015 y ha encontrado en las reformas y la construcción de viviendas unifamiliares, entre otras cosas, un nicho de mercado al alza. El estudio de Iberinform sostiene que el volumen de ventas en 2018 fue de 861.388 euros, pero la compañía confirmó a este periódico que el volumen de facturación aumentó el año pasado hasta los 1,4 millones. Esta evolución ha hecho posible que la plantilla llegue a las 15 personas.
La otra empresa de pequeño tamaño que aparece en la lista es Geprecon (Técnicas de Control, Prevención y Gestión Ambiental). Se trata de una ingeniería y consultoría ambiental que, gracias a la diversificación de su modelo de negocio, ha logrado tener clientes en casi todas las comunidades autónomas, tanto empresas privadas como administraciones públicas. Si gerente, Óscar Varela, explica que la empresa se creó en verano de 2015 y ha mantenido un crecimiento sostenido hasta alcanzar una facturación de 1,2 millones y una plantilla que supera las 30 personas. Según el máximo responsable, que acumula casi 20 años de experiencia en este sector, «no hay un aspecto clave» que explique este éxito. «El esfuerzo y el trabajo... no hay más», señala.
El informe señala que, aunque «sería lógico esperar que las nuevas iniciativas empresariales  más exitosas surgiesen en el mundo digital y tecnológico», realmente no es así. De hecho, el sector con más presencia es el de construcción de edificios residenciales, que representan el nueve por ciento de estas empresas, seguido del de transporte de mercancías por carretera, con el 6,8 por ciento y los restaurantes y puestos de comida, con un 4,8 por ciento. En lo que sí que hay mucho consenso es en la forma jurídica que eligen estas empresas: el 97 por ciento son sociedades limitadas, que exige una menor aportación de capital inicial. Entre todas mantienen cerca de 28.000 empleos con una facturación conjunta que supera los 4.100 millones de euros. 

EMPRESAS DE TAMAÑO MEDIO

Aunque ocho de cada diez son pequeñas empresas, también hay algunas de tamaño medio. En el caso de Valladolid, dos. La primera es Agromaíz & Snacks, la fábrica de aperitivos que Ibersnacks abrió en Medina del Campo en noviembre de 2017 después de una inversión de siete millones de euros. El estudio de Iberinform, realizado con los datos mercantiles procesados por Insight View, indica que este centro de trabajo alcanzó un volumen de ventas en 2018 de 16,6 millones, un 615 por ciento más que en 2015. La otra empresa mediana con presencia en Valladolid que aparece en el estudio es Extrusiones Metálicas. La compañía mexicana compró la antigua Metales Extruidos en 2014 por 12,9 millones de euros con un plan industrial que contemplaba la contratación de 150 personas en el primer año. La facturación en el año 2018 fue de casi 43 millones de euros, aunque el volumen de empleo, según el informe, era de 130 personas. La empresa está situada en el polígono industrial Jalón y comenzó su actividad cuatro meses después de que se hiciera oficial la compra, después de una inversión de 5,3 millones para ampliar las instalaciones.
Otro de los aspectos que confirma el estudio es la concentración de compañías jóvenes y pujantes en las grandes ciudades. Tanto es el así que el 63 por ciento de estas empresas están en Madrid, Andalucía, Comunidad Valenciana o Cataluña. Las comunidades que peor paradas salen son Navarra y La Rioja, con 0,8 y 0,7 por ciento de las ‘gacelas’, respectivamente.
El mismo patrón se repite en el análisis por provincias. Las tres primeras de la lista son Madrid (22 por ciento), Valencia (7,6 por ciento) y Barcelona (6,8 por ciento). Las cuatro empresas de Valladolid sitúan a esta provincia en un modesto 39 puesto de 50 en una clasificación que cierran Ávila, Palencia yTeruel, las tres que solo tienen una empresa ‘gacela’. Los datos vuelven a demostrar que desarrollo económicos y despoblación son dos conceptos que caminan de la mano.

Geprecon. - Foto: Jonathan Tajes

CASO A CASO

D-ZERO CONSTRUCCIONES: Una facturación de 1,4 millones en cinco años 

D-Zero Construcciones. - Foto: Jonathan Tajes

D-Zero Construcciones nació el 15 de abril de 2015 como una empresa de reformas de interiorismo, pero su buena acogida desde los primeros meses hizo que su actividad se ampliase a la construcción, sobre todo de viviendas unifamiliares. Actualmente esa es la base de un negocio que ha ido viento en popa. No en vano, los 110.000 euros que facturaron en el primer ejercicio han pasado a ser 1,4 millones en 2019. El creador de la empresa tardó poco más de un año en hacer la primera contratación y en 2017 la plantilla ya estaba formada por seis personas. Actualmente D-Zero cuenta con 15 trabajadores, entre los que se encuentran tres técnicos, personal universitario cualificado, y el resto son operarios, todos con los cursos de prevención de riesgos laborales.
Esta pequeña empresa llegó al mercado una vez finalizada la tremenda crisis por la que atravesó la construcción. «En los últimos años ha mejorado un poco el sector, se empieza a dar un repunte porque se están concediendo hipotecas y la gente que estaba retraída por la situación económica empieza a invertir en su casa», explica Lara Martínez, responsable de finanzas de la compañía. Además, señala que «la construcción de vivienda unifamiliar ha aumentado bastante y hay mucha demanda». También la reforma integral de edificios, que suponen «importes muy elevados».
Uno de los retos a los que se enfrenta esta empresa a medio plazo es el de encontrar personal cualificado. «Está aumentando mucho la demanda y no encontramos lo que buscamos porque el sector ha estado paralizado y la gente se ha dedicado a otras cosas», asegura.

IBERSNACKS: Un crecimiento de las ventas del 615%

Ibersnacks. - Foto: D.V.

En noviembre del año 2015 Grupo Ibersnacks inauguró una nueva planta de preparación de productos de maíz en Medina del Campo tras una inversión de 3,5 millones de euros. Las instalaciones de Agromaíz & Snacks, de 3.500 metros cuadrados, comenzaron con dos líneas de producción, una para la elaboración de corn chips (tiras o fritos de maíz) y otra para la elaboración de tortillas de maíz o nachos. Ambas tenían capacidad para producir 4.000 toneladas de producto al año. Además, Ibersnack también puso en marcha un Centro de Desarrollo y Mejora, de 800 metros cuadrados distribuidos en dos plantas que acoge espacios para la formación y vigilancia del mercado, y los equipos de laboratorio y estudio de los procesos industriales. Estas instalaciones también supusieron una inversión de 3,5 millones. Es decir, siete entre las dos nuevas instalaciones, que albergaron para empezar a 30 trabajadores.
Siete meses después de iniciar la actividad, la empresa, que es proveedora de aperitivos de Mercadona a través de su marca blanca Hacendado, anunció su intención de invertir otros 2,2 millones en ampliar unas de sus líneas de producción para contratar a otras 25 personas y duplicar un turno de trabajo.
Según los datos del estudio de Iberinform, Agromaíz & Snacks alcanzó en 2018 un nivel de facturación de 16,6 millones de euros, lo que representa un incremento del 615 por ciento respecto a su primer año. De las 834 empresas ‘gacela’ de España, la evolución de la de Medina del Campo la sitúa en el puesto 409.

EXTRUSIONES METÁLICAS: El doble de producción en solo dos años

Extrusiones Metálicas. - Foto: D.V.

La historia de Extrusiones Metálicas tiene ciertos matices respecto al resto de empresas ‘gacela’, ya que la estrategia de esta empresa mexicana fue comprar una compañía de su mismo sector que estaba en pleno proceso de desmantelamiento: Metales Extruidos. Lo hizo en mayo de 2014 tras desembolsar 12,9 millones de euros y con el compromiso de contratar 150 trabajadores durante su primer año procedentes de la antigua plantilla, que estaba formada por 250 empleados.
Después de un proceso de inversión en maquinaria y puesta a punto de las instalaciones, que implicó otro desembolso superior a los cinco millones de euros, la fábrica retomó su actividad el 22 de septiembre de ese mismo año, con casi 50 pedidos ya cerrados procedentes de empresas de Estados Unidos y Francia, si bien durante ese año la producción apenas se quedó con unas 500 toneladas.
Los comienzos no fueron fáciles, pero en 2017 llegó un punto de inflexión gracias a una decidida apuesta por la exportación. De este modo, entre 2017 y 2018 la compañía mexicana logró duplicar la producción hasta las 13.000 toneladas anuales, con una contratación que se acercaba a los 150 empleos comprometidos en el acuerdo de compra.
El estudio de Iberinform señala que la compañía mexicana alcanzó en 2018 un nivel de facturación de casi 43 millones de euros, un 231 por ciento más que en 2015, si bien es cierto que también sostiene que el nivel de empleo en 2018 era de 130 trabajadores.

GEPRECON: Clientes en casi todas las comunidades del país 

Geprecon (Técnicas de control, prevención y gestión ambiental) es una empresa de ingeniería y consultoría ambiental que trabaja especialmente en el campo de los residuos y con empresas del sector energético. Se creó en el año 2015 y tiene muy diversificadas sus áreas de trabajo. Desde estudios de impacto ambiental hasta estudios de protección de fauna cinegética en Galicia, pasando por un proyecto de emisiones atmosféricas es una isla de Indonesia. «Cubrimos todo el espectro de ingeniería ambiental especializada», asegura el gerente, Óscar Varela. Esta diversificación del negocio hace que tengan clientes en casi todas las comunidades del país. Desde empresas privadas hasta administraciones, entre las que se encuentran la Junta de Castilla y León, la Diputación de Valladolid, la Comunidad de Madrid, la Xunta de Galicia, el Consell Insular de Formentera, el Ayuntamiento de Ibiza, etcétera.
La compañía se puso en marcha en junio de 2014 con tres personas, y ahora la plantilla supera las 30 personas. Cinco años de trabajo «muy duros, con mucha dedicación y esfuerzo», que han dado su recompensa, ya que la empresa actualmente tiene un nivel de facturación de 1,2 millones de euros. «El crecimiento ha sido sostenido, pero un poco más exponencial en los primeros años porque partíamos de cero», añade. Los casi 20 años de experiencia que tenía Varela dentro de este sector ha sido uno de los aspectos más importantes en esta evolución. El 95 por ciento de la plantilla son titulados superiores de diversas ramas, muchas de ellas ingenierías.