Castilla y León acoge este fin de semana la Concentración Motorista Invernal Internacional (Pingüinos), que se celebra en la Antigua Hípica Militar de Valladolid, con la previsión de batir el récord de la edición del año pasado, cuando se alcanzaron los 30.470 inscritos. Una cita imprescindible para los amantes de las dos ruedas que también testa la salud de un sector que vive ajeno a la bajada de ventas de los automóviles. No en vano, mientras las matriculaciones de los turismos cayeron un 9,5 por ciento en la Comunidad a lo largo de 2019 las ventas de las motocicletas aumentaron el ejercicio anterior un 11,9 por ciento, hasta las 4.270 unidades. La patronal del sector de la moto relaciona este incremento de las matriculaciones con la «transformación de la movilidad», especialmente en las ciudades, que hace que cada vez más españoles se desplacen en moto.
El buen comportamiento de las ventas de los vehículos de dos ruedas en 2019 fue generalizado en España, donde las matriculaciones de vehículos ligeros superaron las 200.000 unidades. Es la primera vez que el sector supera esta cota desde 2008. En total, la entrega de motos, ciclomotores, triciclos y cuatriciclos se situó en 202.079, un dato que supone un incremento interanual del 12 por ciento. En el caso de Castilla y León, esa cifra se situó en los 4.757 ventas, un 12,8 por ciento más que el año anterior.
Pese al fuerte incremento de las matriculaciones de las motocicletas en la Comunidad en 2019, las 4.270 están aún muy lejos de los ejercicios antes de la crisis económica cuando se llegaron a contabilizar 8.120 ventas en 2008 pero se acercan a las cifras de 2009 (5.306), según los datos facilitados a la agencia Ical por la Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas (Anesdor).
La patronal valora el crecimiento «significativo» de la moto en un escenario con resultados negativos generales de la automoción en España. El secretario general de Anesdor, José María Riaño, apuntó que cada vez más españoles se desplazan en moto y esto se ha traducido en unos datos «muy positivos» para la industria en 2019. «El crecimiento del 12% que presenta el sector no solo es muy positivo sino que es un claro indicador de hacia dónde va el mercado de la movilidad, por la ciudadanía cada vez apuesta más por el uso de vehículos ligeros, como la moto, más sostenibles en términos medioambientales, y que ofrecen ventajas de movilidad en las ciudades», precisó.
Según las cifras recopiladas por Anesdor para Ical, de las 4.270 matriculaciones del año pasado en la Comunidad, más de la mitad (55,4%) correspondió al segmento de carretera, con 2.366 ventas. Los scooters significaron otro tercio (33,6%) y las motos de campo (cross), un 10,5%.
Además, el 2019 supuso un «punto de inflexión» en el mercado de la electromovilidad, después de matricularse un total de 12.225 motos eléctricas. Las motos eléctricas crecieron un 67% respecto al año anterior, hasta suponer un seis por ciento del mercado, situándose como el vehículo eléctrico puro con mayor penetración en el mercado.