Sanidad ha notificado 1.987 nuevos positivos durante las últimas 24 horas, lo que supone un incremento en comparación con los 1.146 de este jueves. No obstante, continúa la tendencia a la baja con respecto a la semana pasada (2.219 hace siete días).

De esta forma, el número de personas que han pasado la enfermedad desde el incicio de la pandemia en la provincia es 131.439, de los que 131.032 fueron diagnosticados con algún tipo de prueba. 

No se han registrado fallecimientos en los hospitales y se mantienen en 1.390 las muertes en la provincia desde el inicio de la pandemia, cortando así la racha de fallecimientos elevada de los últimos días. 

En cuanto a los brotes activos que se mantienen en la provincia, contúan con la tendencia al alza y ya son 66, que afectan a 486 personas (hace una semana eran 37). 

Las altas hospitalarias han sido 13 las últimas 24 horas, lo que sitúa en 9.086 el número de pacientes que ha superado la enfermedad tras permanecer ingresados.

Estos datos han hecho que la incidencia a catorce días suba respecto a la de ayer, con 4.367 casos por cada 100.000 habitantes a catorce días.

Se mantienen estables el número de pacientes en los hospitales, con 33 en UCI y 161 en planta. 

Castilla y León repitió por tercera vez esta semana los 21 muertos por covid en los hospitales de la Comunidad, después de registrarse la misma cifra ayer jueves y el pasado martes y suponer el techo de fallecidos de la sexta ola. Además, la Consejería de Sanidad notificó 7.825 nuevos contagios frente a los 5.494 de ayer, lo que significa un 42,4 por ciento más, aunque es un 26,4 por ciento menos que hace una semana. Por otro lado, las residencias registraron tres decesos en sus propias instalaciones desde el pasado martes y son seis más que el viernes pasado, según los datos facilitados por la Junta y recogidos por la Agencia Ical.