El XXIII Festival de Teatro Alternativo de Urones de Castroponce, FETAL 2019, llegará mañana, martes 6 de agosto, y el miércoles, día 7, a Tiedra y Valdunquillo, dos de las localidades vallisoletanas protagonistas este año de la extensión de la cita en Tierra de Campos.
De este modo, el teatro de calle y la música de raíz ibérica marcarán el comienzo de la semana de la nueva edición de FETAL, cuya programación se extenderá hasta el domingo 18 de agosto.
Según ha informado la organización del FETAL, mañana será el turno de Fabularia Teatro que recalará a las 20.00 horas en la plaza Mayor de Tiedra con el espectáculo Ultreia en un particular homenaje al Camino de Santiago. Para ello, Trinidad Osorio da vida a una fotógrafa que, mientras realiza un reportaje sobre el Camino de Santiago, conoce a un "misterioso peregrino" (Raúl Gómez) que le va contando los secretos de esta ruta.
"Junto a él, la fotógrafa descubrirá que el Juego de la Oca es, en realidad, la primera guía del Camino, camuflada bajo la apariencia de un entretenimiento para niños ideado por los templarios", han explicado desde la organización del festival.
Con este espectáculo, han precisado las mismas fuentes, la compañía vallisoletana rinde homenaje al Camino de Santiago, que sirve para poner también el foco de atención en el drama de los refugiados, "todas esas personas que viajan con lo puesto en busca de un futuro mejor". "En estos momentos, en los que cada vez se cuestiona más la importancia de una Europea unida y de un mundo sin fronteras --continuan desde el FETAL-- se hace necesario contar la historia común de los pueblos y las civilizaciones, de los sueños y leyendas que los unen en las estrellas".
Por su parte, el Teatro La Ermita de Valdunquillo recibirá a las 20.30 horas del miércoles 7 a Carlos Herrero, alma del grupo de folk ibérico El Naán, que presentará su último trabajo discográfico en solitario, Trashumante. "Con este álbum, Herrero propone una renovación de la música de raíz ibérica, haciendo especial hincapié en su propia tradición, la castellana, y en el uso de esa estética mesetaria para una creación contemporánea", han indicado las mismas fuentes a Europa Press.
Según FETAL, Trashumante es un homenaje a los indígenas de Iberia y un canto a la diversidad de las raíces, con rabeles, cántaros, flautas y panderos, ecos de un mundo que desaparece. Como explica el propio Herrero, "el alma de la música trashumante es el canto. El canto que dormía a los niños en sus cunas. El canto de ronda al pie de las ventanas. El canto de faenas y trabajos. El canto a la vida y a las cosechas. Ese canto que fue testimonio de gozos y fatigas, de lo que fuimos, de lo que somos".