Renault entregó este miércoles a los sindicatos una memoria explicativa para justificar la solicitud del expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que ya les avanzó el pasado lunes. La falta de semiconductores vuelve a ser la razón de esta medida, que contempla 40 días de parada en la planta de Carrocería y Montaje y las Direcciones Centrales y otros 17 en la de Motores, con un periodo de aplicación que va desde el 1 de agosto al 31 de diciembre. Además, en la fábrica de Palencia y sus líneas concatenadas, algunas de las cuales se encuentran en Valladolid, se plantean 61 días de ERTE para toda la plantilla. Estas paradas solo se podrán aplicar cuando el trabajador haya agotado el resto de medidas de flexibilidad contempladas en el convenio.

“Desde CCOO lamentamos esta situación, puesto que tenemos claro que no es un problema estructural, sino coyuntural de Renault y del sector del auto, pero tampoco lo hemos generado los trabajadores, señala el sindicato en una nota de prensa. "Analizaremos con responsabilidad esta situación, pero exigimos esa misma responsabilidad a la Dirección de la empresa para buscar un acuerdo beneficioso para ambas partes”, avanzan las mismas fuentes.

UGT anticipa que será imprescindible que la empresa ofrezca las mismas condiciones que en anteriores ERTE para que el sindicato dé su visto bueno al planteado este miércoles.

Por su parte, CGT ha pedido a la empresa información sobre el número de contratos formalizados desde que el actual ERTE está en vigor. "Estamos comprobando que a muchos trabajadores que son contratados al día siguiente se les manda a su casa por el expediente, y creemos que es algo que no es nada coherente", señala Unai Hernández, representante de la formación. CGT también ha pedido datos sobre las horas extra y prolongaciones de jornada que se están haciendo. Este sindicato plantea, en lugar del ERTE,  excedencias voluntarias con compensaciones económicas y reducciones de jornada de hasta el 50 por ciento con una compensación salarial del 60 por ciento.