El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, anunció hoy que el parque público de alquiler social se ampliará hasta las 3.000 viviendas y precisó que las convocatorias no exigirán un nivel de ingresos mínimos al solicitante, sino que se priorizará la unidad familiar en situación más vulnerable.

Suárez-Quiñones, que desgranó su programa de gobierno en las Cortes, inició su intervención con medidas sobre la viviendas, entre las que se encuentran también un nuevo programa de ayudas al alquiler para jóvenes del medio rural y la completa erradicación del chabolismo.

El consejero defendió el carácter social de la vivienda y avanzó que con tal objetivo se realizará una "completa reforma" de la ley de Derecho a la Vivienda en Castilla y León, en la que se reorientarán las ayudas y los canales adecuados para que las personas con más necesidades las puedan recibir.

En el mismo marco, señaló el desarrollo de la Estrategia de Regeneración Urbana de Castilla y León, aprobada en la pasada legislatura, la ejecución de las áreas de regeneración urbana, la convocatoria de subvenciones destinadas a comunidades de vecinos para fomentar la rehabilitación edificatoria o el impulso del programa rehabilitare para edificios de titularidad municipal en cascos urbanos.

Igualmente, avanzó que en colaboración con las administraciones central y local se planificarán nuevas áreas de rehabilitación, regeneración y renovación urbana, en especial en las ciudades con más de 20.000 habitantes.