Óscar Puente ha sido claro y contundente en la defensa de la plantilla del Real Valladolid en el caso de la operación Oikos, dando un tirón de orejas al club por no haber defendido con más firmeza a los suyos: «El club ha adoptado una actitud en defensa de lo que considera que son sus intereses. Yo desde luego hubiera sido mucho más firme en la defensa de la plantilla porque a los equipos humanos hay que cuidarlos y la plantilla del Real Valladolid es el equipo humano con el que cuenta el club. Pero bueno cada uno en su casa sabe lo que tiene que hacer». El alcalde electo ha asegurado, en Noticias Medianoche, de La 7 de Castilla y León Televisión, que siempre ha tenido «plena confianza, y lo digo desde el principio, en los jugadores del Real Valladolid y en especial de Borja, al que conozco».

Además, se ha mostrado molesto por cómo se ha tratado a los futbolistas del Pucela en todo este caso, repitiendo alguna idea que había esbozado el presidente de LaLiga, Javier Tebas: «A mí, desde luego, como alcalde, me ha molestado profundamente que se ponga en tela de juicio la honestidad de los jugadores del Real Valladolid, cuando las pruebas hasta el momento existentes son muy endebles. En algunos casos como en las conversaciones telefónicas de Aranda suenan más a fanfarronada que a algo realmente sólido. Al final lo relevante para acusar a los jugadores del Real Valladolid es que hubiera alguna prueba, alguna conversación en la que de alguna manera se ponga en entredicho la decisión del resultado del partido contra el Valencia. Y eso que sepamos no existe».
Para concluir con un apunte igual de contundente: «Hay que respetar la presunción de inocencia y la honorabilidad de unos jugadores y de un club que está en entredicho de manera injusta. Y el tiempo estoy convencido de que lo demostrará».