La primera edición de los premios 'Ingenia Valladolid' ha permitido constatar la sintonía existente entre las políticas municipales y las inquietudes actuales de la ciudadanía. El denominador común de los 51 proyectos que se han presentado ha sido el desarrollo sostenible, protagonista de las cinco ideas que han resultado premiadas por el Ayuntamiento.
Este es el signo de los tiempos: la preocupación por la protección de la salud y el bienestar. Agua, aire limpio, aprovechamiento energético, economía circular, más espacios seguros para desplazarse, trabajar o disfrutar. Esta es también la hoja de ruta de los 193 países que se han adherido a la Agenda 2030 de Naciones Unidas y es, igualmente, la única apuesta viable de todas las ciudades que aspiran a mejorar sus estándares de calidad de vida.
El Ayuntamiento de Valladolid está comprometido con estos objetivos globales, pero cuenta con el respaldo y las aportaciones de Lucía y José, quienes han propuesto que las terrazas y balcones desnudos de nuestra ciudad se puedan ir cubriendo de especies vegetales diversas y que donde ahora hay rotondas y espacios urbanos diáfanos puedan crecer microbosques que lleguen a ser frondosos en sólo dos años.
También cuenta el Ayuntamiento con Silvia y su hija Estrella, premiadas por su iniciativa para favorecer el consumo responsable y dar una segunda oportunidad a tantos y tantos productos usados que a menudo tiramos, mediante mercadillos vecinales. A esta colaboración por el bien común se suma también José María, quien ha visto reconocido su proyecto para intentar integrar todos los esfuerzos por evitar el despilfarro alimentario. A todos ellos se ha unido Alberto, quien también ha visto recompensada su propuesta para transformar vertederos incontrolados en espacios verdes.  
Escuchar, reconocer las mejores ideas y comprometerse a llevarlas a cabo es sin duda una gran inversión. El ingenio no tiene edad. El empuje y la visión de las personas más jóvenes también sintoniza con la experiencia y la perspectiva de las más veteranas. Pensar en solitario o juntos, en escuelas, institutos o facultades, asociaciones o centros cívicos, por qué no en la calle… puede hacerse en cualquier lugar. Si siente esa inspiración, le aguarda la II edición de estos premios en 2022. Gracias, de antemano, por hacer de Valladolid una ciudad mejor.