La Diputación de Valladolid se ha fijado la transformación digital como la prioridad para la provincia en el recién comenzado 2020, para lo cual ya ha encargado una auditoría que permita evaluar el estado actual de la cobertura en el medio rural con el fin de poder "empezar a trabajar".
En una entrevista concedida a Europa Press, el presidente de la Diputación, Conrado Íscar, ha subrayado esta digitalización como una "prioridad", la cual incluye tanto su implantación en empresas de la provincia como la dotación de servicios a los ciudadanos a través de la red.
Si bien Íscar reconoce que la dotación de infraestructuras y servicios de cobertura en el medio rural no es competencia de la Diputación, ha abogado por ofrecer "incentivos" a las empresas de telecomunicaciones de forma "coordinada" con el resto de administraciones que compense la falta de rentabilidad que para estas compañías tiene desplegar la red en estos municipios.
El desarrollo de unos nuevos Planes Provinciales y el mantenimiento del "nivel muy alto" en la prestación de servicios son otras de las prioridades que el equipo de Gobierno se fija para el nuevo año, con las cuales se ha comprometido "sin esperar" a que hubiera Presupuestos tanto en el Ejecutivo central como en la Junta de Castilla y León.
A pesar de las "dificultades" que enfrenta la Diputación fruto de la inestabilidad política que vive España, Conrado Íscar ha destacado que esta institución ha actuado en lugar de "mirar para otro lado" a fin de "no dejar abandonados" a los municipios y ciudadanos de la provincia.
En cualquier caso, ha insistido en la necesidad de que se forme Gobierno en España, cuya ausencia "está perjudicando a muchas instituciones".
BALANCE "POSITIVO" DE 2019
Respecto al año que termina, Conrado Íscar ha realizado un balance "positivo" de un 2019 "de muchísimo trabajo" en el que se constituyó una nueva Corporación Provincial tras las elecciones municipales del 26 de mayo y en la que tomó el relevo como presidente de Jesús Julio Carnero, de quien ha subrayado la "amistad" que los une.
Íscar se ha referido a los alrededor de seis meses que lleva al frente de la Diputación como "muy intensos" por la puesta en marcha de la nueva estructura o la aparición de "nuevas necesidades" en los municipios de la provincia, tras lo que espera en que en 2020 el nuevo equipo de Gobierno trabaje ya con total normalidad.
Respecto al relevo en la Presidencia de la institución, Íscar ha reconocido que se ha tratado de un "cambio importante" durante el que el Grupo Provincial Popular fue "una piña en todo momento" y que se resolvió mediante "decisiones consensuadas" con las direcciones autonómica y nacional del partido.
Así, el nuevo presidente ha expresado las "ganas de trabajar" con las que ha asumido el cargo después de haber formado parte del anterior equipo de Gobierno como responsable del área de Servicios Sociales y de haber participado en la elaboración del programa electoral del PP para la Diputación y en el que se trabajó con alcaldes y ciudadanos de la provincia a fin de "dar respuesta a sus necesidades".
Junto al relevo en la Presidencia, el nuevo equipo de Gobierno se ha caracterizado también por el paso de un Ejecutivo monocolor del PP a uno de coalición con la entrada de Cs, una fórmula con la que sus integrantes se encuentran "cada vez más sueltos", como ha reconocido Íscar.
Conrado Íscar ha admitido que compatibilizar la Presidencia con su cargo de alcalde de Matapozuelos requiere "un mayor esfuerzo" y dedicar "más horas", además de "organización y planificación", como ya hubo de hacer durante los cuatro años anteriores en los que formaba parte del Gabinete de Jesús Julio Carnero, aunque ha subrayado que para poder llevarlo a cabo con éxito es necesario contar con equipos en los que apoyarse, tanto en la institución provincial como en su municipio.