UGT ha insistido en que no se cierre la UCI pediátrica del Clínico de Valladolid ni ningún otro servicio del hospital de referencia y ha criticado que Sanidad "emborrone" el discurso para que nadie pueda asegurar qué va a ocurrir.
El sindicato, en un comunicado recogido por Europa Press, ha criticado que después de una semana de declaraciones "contrapuestas" se demuestre que la política comunicativa de la Consejería de Sanidad es "la del calamar", es decir, que las afirmaciones que se hacen "emborronan" el discurso final "para que, a día de hoy, nadie pueda asegurar qué se pretende ejecutar en el Hospital Clínico".
UGT ha censurado que el propio gerente de Salud de Valladolid se reuniera hace 72 horas con profesionales del Clínico y les indicara que todo había sido "un malentendido" y que lo único que se iba a hacer era la separación funcional de la UCI Pediátrica y Neonatal del Clínico, sin traslados de ningún tipo al Río Hortega y que después se afirme que se va a llevar la UCI Neonatal a éste último centro por crtierios "internacionales" que ha reclamado que se hagan públicos.
"Basta ya de mentiras y trapicheos", ha asegurado el sindicato, que ha incidido en que los poderes públicos están "para transmitir confianza y serenidad" a la ciudadanía y a los empleados públicos a su cargo, "obligación que esta Consejería ha decidido guardar en el cajón junto al diálogo, la negociación y la transparencia tan cacareada".
MENOSPRECIO A LOS EMPLEADOS
Esta actitud, ha añadido, está provocando que los trabajadores del Hospital Clínico estén "llegando al límite de su paciencia" porque bajo estas condiciones de "incertidumbre y menosprecio" es complicado realizar el trabajo del día a día. "Más aún cuando, en otro de esos ataques descerebrados de la Consejería, se ha procedido al recorte progresivo de plantilla que ha provocado el incremento de la lista de espera que tan ufanamente presentó el insigne Mitadiel", ha asegurado. El sindicato ha criticado que de quien "debía tripular la nave y dar las explicaciones oportunas" como es la consejera, Verónica Casado, sólo se ha recibido "silencio".
Por ello, el sector de Sanidad de la Federación de Empleados de Servicios Públicos (FeSP) de UGT Castilla y León ha insistido en la defensa del Hospital Clínico de Valladolid y sus trabajadores ante lo que ha calificado de "ataque sin sentido contra su honorabilidad y profesionalidad".
Finalmente, ha exigido "una vez más" que no se desmantele ni un solo servicio del Hospital de referencia de Valladolid, "le pese a quién le pese", y que se retire definitiva y públicamente el "plan de cierre" de los cuidados intensivos pediátricos.