Los 'exiliados' a Madrid piden medidas para poder volver

Óscar Fraile
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Un grupo de castellanos y leoneses en Madrid se organiza en una asociación para dar visibilidad a un colectivo cada vez más amplio y que denuncia la falta de oportunidades en sus provincias de origen

68.000 vallisoletanos se van a trabajar a Madrid en 10 años

Fruto de a ‘sangría’ de población que sufre Valladolid, que es común en todas las provincias de Castilla y León, se ha creado un grupo de castellanos y leoneses en Madrid con la intención de hacer fuerza para que la Administración impulse las medidas necesarias para que puedan volver a su tierra. Son unas 50 personas que el jueves de la semana pasado mantuvieron una reunión en la Casa de Soria de Madrid. Fue la segunda, después de otra el 17 de octubre en la Casa de Zamora.
Juan José Álvarez es un ingeniero vallisoletano que impulsó la formación de este grupo, junto a otra persona. Se tuvo que ir hace siete años a Madrid y reconoce que buena parte de los integrantes de este nuevo colectivo se hubieran quedado en Castilla yLeón si hubieran tenido posibilidad de hacerlo. «Los números hablan por sí solos, no es normal que el 40 por ciento de los titulados de Castilla y León se vaya fuera, porque es más del doble que la media nacional», señala. Una realidad que casi se ha asumido como normal entre los titulados superiores. «Yo estudié Ingeniería Industrial y entre mis compañeros de clase se daba por hecho que nos teníamos que ir al acabar, era algo de lo que se hablaba con total normalidad, pero cuando he venido a Madrid he visto que no es algo tan normal entre la gente de Cataluña, País Vasco y Valencia, donde dan por hecho que van a trabajar en sus respectivas ciudades», explica.

¿Por qué esa situación es peor en Castilla y León que en otras zonas de España? El grupo todavía no tiene definido su argumentario, pero Álvarez tiene una opinión muy clara: «Yo creo que coinciden dos factores, uno es el nulo peso político que tiene Castilla y León en España, porque es una comunidad de tercera que no pinta nada, y el otro es la marginación que se hace desde el Gobierno central a comunidades que no reivindican lo propio, como Castilla y León», asegura. Buena prueba de ello es que en Madrid esta Comunidad «nunca aparece en el panorama político, ni en los medios, y nadie conoce quién es el presidente». Esta situación ha derivado en un mapa de España con un punto en el interior, la capital, que «centraliza absolutamente todo y está superpoblado», mientras las comunidades de alrededor «se convierten en geriátricos donde solo quedan los abuelos».