La Diputación de Valladolid ha asumido la responsabilidad y el compromiso de transformar la provincia en una tierra más sostenible, moderna, innovadora, digital, cohesionada, inclusiva e igualitaria. Para ello, optará a los fondos europeos de recuperación con 80 proyectos por importe de 83 millones de euros, con los que busca relanzar su economía dirigiendo todos los esfuerzos hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que se convierten así en objetivos de las políticas y estrategias de esta institución. Todo ello, mediante la acción concertada y la búsqueda de alianzas público-privadas.
El principal objetivo es apostar por el desarrollo de actuaciones que se enmarquen en la agenda rural y de lucha contra la despoblación; la transición energética inclusiva; la modernización y digitalización del tejido industrial y de las pymes; la recuperación del turismo y el impulso del emprendimiento en el territorio; la apuesta por la ciencia e innovación en colaboración con las universidades, así como por la educación y el conocimiento vinculado a los recursos endógenos; propiciar una nueva economía de los cuidados y llevar a cabo una apuesta firme y decidida por las políticas de empleo.
A falta de conocer los criterios definitivos de reparto de los fondos y de financiación de los proyectos, la Diputación de Valladolid dispone ya de un plan de actuación que propone un nuevo modelo de provincia para el futuro inmediato y una administración provincial del siglo XXI que prestará servicios de manera inteligente, transparente y eficaz.
Todos los proyectos que se han presentado se enmarcan en ocho ejes de actuación diseñados por el propio equipo de trabajo. De ellos, seis están directamente vinculados al territorio, y los otros dos con el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
OCHO EJES. El primer eje hace referencia a la innovación y el uso de las tecnologías. El segundo se centra en la ciudadanía, con atención especial a los servicios sociales, el transporte, la movilidad y la gobernanza. El tercero se refiere a la agroalimentación y el cuarto al medio ambiente y la energía. El quinto se encamina hacia el turismo gastronómico y enológico y el patrimonio.
Por su parte, el sexto se centra en la promoción económica y la creación de empleo y el séptimo a la Administración para el siglo XXI. El último propone recoger las propuestas de colaboración público-privadas con otras organizaciones, entidades y empresas.
Desde la Diputación de Valladolid tratan de aprovechar la financiación europea para modernizar la economía de la provincia, crear empleo y rejuvenecer el tejido productivo, atendiendo a las directrices que fija el plan para una España verde, digital, sin brechas de género y cohesionada en el marco de las diez políticas palanca incluidas en el Plan de Recuperación Nacional.
Llevan trabajando el diseño y elaboración de estos proyectos desde el pasado mes de noviembre a través de un equipo específico. Además, se ha constituido un Comité de Seguimiento de Proyectos Europeos que elevará iniciativas concretas, con el fin de poder optar al importante paquete de ayudas que se está desplegando desde la Unión Europea, no solo las que se canalizarán a través del programa Next Generation, sino también a través de otras ayudas procedentes de las líneas de financiación del nuevo Marco Financiero Plurianual 2021-2027.
De todo ese trabajo previo se han seleccionado estos 80 proyectos, que se han ido desarrollando y completando, siempre teniendo en cuenta que se trata de un ámbito abierto a sumar nuevos proyectos que pueden ser propuestos por las propias Áreas de la Diputación de Valladolid o por distintas entidades públicas o privadas.
Aunque aún falta por conocer los criterios de financiación definitivos tanto de la Unión Europea como del Gobierno de España, la ejecución de todos estos proyectos supondría una inversión superior a los 83 millones de euros, por lo que, según el presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, «estamos ante una oportunidad única. Nuestro reto con la llegada de los fondos europeos es aprovechar esta tierra de oportunidades que tenemos, la provincia de Valladolid, y hacerla más sostenible, moderna, innovadora, digital, cohesionada, inclusiva e igualitaria».
DEPURACIÓN DE AGUAS. Otra muestra del trabajo de la Diputación para conseguir que la provincia crezca económicamente ligada a los Objetivos de Desarrollo Sostenible es la inminente puesta en marcha de una Plan Provincial de Depuración de aguas para los municipios de menos de 500 habitantes, que se incluye en el proyecto de Presupuestos 2021, gracias a un presupuesto que asciende a 900.000 euros.
Esta iniciativa complementa el convenio de depuración suscrito entre la Junta y la Diputación de Valladolid para los municipios vallisoletanos de más de 500 habitantes y cofinanciado por ambas instituciones. En total, sumando la aportación de 700.000 euros de la Diputación a este convenio y el nuevo Plan Provincial que será financiado íntegramente con fondos propios, la institución destinará 1,6 millones de euros a la depuración de las aguas en la provincia durante 2021.
SUBVENCIONES PARA ACTIVIDADES VINCULADAS a fomentar el desarrollo del ecoempleo. La Diputación de Valladolid ha aprobado subvenciones a asociaciones de empresarios y comerciantes con un presupuesto de 340.000 euros para que desarrollen actividades de promoción y formativas vinculadas al fomento del desarrollo sostenible.
Autónomos y microempresas recibirán ayudas para fomentar proyectos de ecoempleo o empleo verde, que contribuyan a preservar y restaurar el medio ambiente, y para proyectos innovadores que promuevan el asentamiento de la población con iniciativas generadoras de empleo y riqueza. Otra línea de ayudas favorece el asociacionismo de transformación ligado a productos de calidad preferentemente, con la puesta en marcha de plantas de transformación o modernizando las que ya existen. Cada beneficiario podrá recibir una subvención máxima de 10.000 euros.