El 5% de los menores de un año de CyL están sin vacunar

SPC
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En 2017 -último año disponible- hubo más de 500 bebés que no participaron en la primovacunación

El 5% de los menores de un año de CyL están sin vacunar

A pesar de las evidencias médicas y científicas, todavía un cinco por ciento de los bebés menores de un año están sin vacunar en Castilla y León, unos 500 en 2017, todo ello después de que la Organización Mundial de la Salud y diversas instituciones ratifican que cada año salvan cerca de tres millones de vida, que podrían ser cuatro si se universalizaran. No hay duda de que los programas de vacunación son la mejor manera costo-eficaz de evitar enfermedades y que a lo largo de la historia han contribuido prácticamente a erradicar algunas que han provocado epidemias.

Pese a esta realidad y a que las coberturas vacunales en Castilla y León son elevadas, los datos revelan que todavía hay un cinco por ciento de bebés que no recibe las vacunas indicadas en los primeros meses de vida, según los datos facilitados por la Consejería de Sanidad a Ical. Las tasas de vacunación de los últimos cinco años arrojan que en 2017 -último año disponible- hubo más de 500 niños menores de 12 meses que no participaron en los programas de primovacunación, 588 de los 16.406 que configuraban la población diana. 

A esta situación se une que a medida que los niños crecen, los programas de vacunación bajan sus coberturas, ya que al rechazo y dudas iniciales de algunos padres se suma el olvido de otros. Por poner un ejemplo, en el caso de la vacuna del meningococo que se pauta a los 4 y a los 12 meses se pasa de una cobertura del 96,4 al 94,75% (según datos de 2017). Tal es la preocupación, que la OMS ha incluido en su programa estratégico la reticencia o la negativa a vacunarse como una amenaza que equipara a otros problemas de salud

Repunte del sarampión

Y como consecuencia, frente a la ‘moda’ de no vacunar, repuntan las enfermedades, algunas de las cuales se daban por erradicadas en algunos países. El caso más reciente es del sarampión, con un incremento del 30 por ciento en todo el mundo. La situación en el territorio de Castilla y León no es para alarmarse, pero ya en 2017 se estudiaron seis casos definidos como tal por el Plan Nacional de Eliminación del Sarampión y la Rubéola, cuando desde 2013 no se había notificado ningún caso.