La capital crecerá con un barrio verde de 3.000 pisos

M.Rodríguez
-

En esta nueva área residencial, ubicada entre las carreteras de Madrid y de Segovia, está previsto que, al menos, la mitad sea vivienda de promoción pública

La capital crecerá con un barrio verde de 3.000 pisos

El Ayuntamiento pretende desarrollar el ecobarrio de La Florida, en la zona suroeste de la capital, con más de 3.000 viviendas, gran parte de ellas con algún tipo de protección.   Una nueva zona residencial que se plantea con diversidad de diseños urbanos y elementos paisajísticos para «crear un espacio urbano amable, funcional y sostenible, con carácter propio», como explica el edil de Planeamiento, Manuel Saravia.  

Este plan se encuentra ubicado en el sureste de la capital, entre las carreteras de Madrid y de Segovia, en el tramo comprendido entre el Paseo Juan Carlos I y la Ronda Interior Sur. Ocupa un espacio estratégico, con terrenos de Zambrana y la antigua Uralita. «Es uno de los sectores de mayor tamaño de la ciudad, con 46,2 hectáreas de superficie, a las que hay que sumar otras 33,6 hectáreas de sistemas generales», detalla Saravia.

Aunque realmente este es un viejo proyecto municipal, con casi 40 años de historia, porque el sector se propuso como suelo urbanizable en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 1984. Pero no tuvo éxito entonces, y tras la actualización en 1997 de aquel PGOU,  tampoco se desarrolló, al igual que ocurrió en la de 2004, cuando volvió a proponer una ordenación con las mismas características.En el nuevo proyecto se contempla que el 50% del uso residencial previsto se destinade a vivienda protegida. «El Ayuntamiento es el mayor propietario del ámbito, con el 37% del suelo. Se ha considerado oportuno impulsarlo mediante el sistema de cooperación, por medio de la Sociedad Municipal de Suelo (VIVA)».

Desarrollo.

El coste previsto de la urbanización se ha fijado en unos 25 millones de euros. El proyecto de actuación, que ya está avanzado y se espera aprobar en el primer semestre de esta año, se irá definiendo según la demanda de las viviendas que se registre.

En ese contexto, se ha previsto que el diseño de la urbanización se desarrolle mediante un concurso público. «Se quiere que el nuevo barrio cuente con una identidad bien definida. Singular», apunta el concejal. Una de sus principales característas será la sostenibilidad y por eso se conservarán los hábitats, flora y fauna existente. Pero también se estudiará la posibilidad de implantar redes de suministro de energía centralizadas en el barrio, además de ofrecer posibilidades para el compostaje y la reutilización de residuos orgánicos».

También se apuesta por fomentar la multifuncionalidad de los espacios públicos, esto implica integrar los principales focos de actividad (tiendas, colegios, lugares de trabajo) en el interior, con mezcla de usos y próximos a paradas de transporte público. También se pretende minimizar la superficie destinada a tráfico rodado motorizado. «Se plantearán zonas libres de coches o con tráfico reducido de dimensión suficiente». Además,  dispondrá de recorridos peatonales y ciclistas.

Esta actuación también tiene una vertiente social porque se plantea «reintegrar» a los vecinos del poblado de Juana Jugan, para lo que se pondrá en marcha un proyecto educativo, social y de vivienda. En este sentido, Manuel Saravia apuesta por aplicar un urbanismo social en su desarrollo.