La posibilidad de poder celebrar la Feria y Fiestas de la Virgen de San Lorenzo se ha ido desinflando conforme evolucionaba la crisis de la covid-19. El Ayuntamiento de Valladolid ya tenía cerrada la programación cuando se declaró el estado de alarma en marzo, pero se mantuvo durante unos meses la opción de buscar alternativas para la celebración de las fiestas patronales. La esperanza de que la situación sanitaria mejorase se fue difuminando, a pesar del fin del estado de alarma, y la evolución negativa de las últimas semanas ha dado la puntilla a cualquier propuesta que no pase por actividades en un recinto al aire libre con aforo controlado.

El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ya había asegurado hace unos días que «al 99,9 por ciento» se cancelaría la celebración de conciertos previstos en la Plaza Mayor, dado que supondría la aglomeración de unas 25.000 personas, lo que dificultaría los controles sanitarios. «Es evidente que las fiestas como las que conocemos no van a poder celebrarse», lamentaba. Esta misma semana las peñas anunciaban que también anulaban su programa festivo y los hosteleros y los feriantes ya habían hecho lo propio hace unas semanas.

Y la opción que se plantea, visto los buenos resultados de la programación de ‘A cielo abierto» es continuar en esa línea. Esta programación estival se organizó para «recuperar» la vida cultural de la capital tras los tres meses de confinamiento. Y durante este verano ofrece noventa propuestas, que llevan a cabo 65 artistas, compañías y formaciones vallisoletanas dedicados a la cultura, hasta el 31 de agosto. Asimismo, todas las empresas de servicios auxiliares contratadas para desarrollar esta programación serán locales.

La idea que barajan los responsables municipales es una extensión de este programa con unas 60 actividades culturales (conciertos, danza, teatro, actividades infantiles,...) entre los días 4 y 13 de septiembre. 

Espacios.

Todas se celebrarán en espacios al aire libre, en recintos donde se pueda controlar y limitar el aforo de público. Los espacios han sido seleccionados con la garantía de  que se cumplirán con todas las indicaciones establecidas por el Gobierno para cada momento en lo referente a limitación de aforo, señalización de distancia de seguridad y medidas de higiene y protección. En el listado escenarios figura el Patio Herreriano, la Cúpula del Milenio, el patio de la Feria de Muestras, el claustro de los Filipinos o los patios de varios colegios, entre otros. Algunos ya figuraban en el programa A Cielo Abierto y otros son nuevos.

«Hace un mes la perspectiva era buena y ahora ha cambiado a peor. Hay que ser prudentes por si empeora en otras dos semanas. No creo que tardemos mucho en tomar una decisión, porque más o menos se va vislumbrando lo que se va a poder hacer, y la decisión la tomaremos en la segunda semana de agosto», recordaba hace días el alcalde. En ese momento ya apostaba por el formato de conciertos pequeños repartidos por toda la ciudad con el propósito de animar a la ciudadanía a acudir a las terrazas y consumir «algunas muestras de gastronomía».