Comida cien por cien americana

M.B
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El restaurante Brook Steakburguer nos descubre parte del secreto de sus hamburguesas en la sección #Elfogonde

Restaurante Brook Steakburguer

Esta aventura comenzó en 2011. Probablemente antes. Ya estaba en la cabeza de Alberto Pastor. Pero la terminó de visualizar en un viaje por Estados Unidos con su amigo Lolo. Allí hicieron un recorrido por las mejores hamburguesas de Nueva York: «No las típicas de franquicias, sino en callejuelas de Manhattan, Brooklyn...». Y de allí se trajo algo más que la idea. Por entonces, desde el Puente de la Hispanidad hacia la zona sur de la ciudad no había nada que se acercase a la comida americana. Así que, aprovechando un local donde se iba a instalar su padre, abrió ese 2011 su primer Brook Steakburguer. 

El siguiente paso fue la decoración. Que se supiese dónde se entraba: «Buscamos el interiorismo de Estados Unidos pero con personalidad. Con detalles de aquí, blanco, negro, rojo...». Y el último, la comida: «Durante la obra me fui a Madrid y Barcelona, donde estaba floreciendo la hamburguesa gourmet para empaparme de las últimas novedades. A mi vuelta empezamos a trabajar en las pruebas». Y así nació Brook Steakburguer, que dio sus primeros pasos en unas fiestas de La Flecha, donde se ubica el primer local de este negocio. 

En 2015 llegaría el segundo, ya en Valladolid capital. De nuevo de la mano de Alberto Pastor, pero ahora con dos amigos como socios: «Aprovechamos un local muy grande para hacernos con él y lanzarnos a esta segunda aventura».

Hablar de Brook Steakburguer es hacerlo, irremediablemente, de comida cien por cien americana: de aros de cebolla, alitas, hot dog, sandwiches, pero, sobre todo, de las hamburguesas. «Somos un restaurante americano más estilo hamburguesería. Al final, la clientela es lo que más nos pide, las burguer», reconoce Alberto, que pone el acento también en el segundo plato estrella de sus locales, el costillar.

Cuenta con dos equipos de cocina de seis personas, con Bea y Walter desde el principio en Arroyo y Padilla, respectivamente. Y aclara: «Todo, todo, lo elaboramos nosotros».

Estos días, de confinamiento por la crisis del Covid-19, tiene una de las cocinas abiertas para dar respuesta a aquellas peticiones que llegan de comida para llevar. «Es un esfuerzo del equipo pero creo que hay mantenerlo», señala. Desde el pasado fin de semana decidió cerrar al público hasta nuevo aviso sus dos restaurantes, pero manteniendo el servicio a domicilio «para hacer más fácil la estancia en casa». Y ya ha colaborado sirviendo altruistamente la cena en uno de los hospitales de la ciudad.

El local de La Flecha tiene una capacidad para 55 comensales, mientras que en Padilla llegan a los 130. «Al final en este segundo estamos haciendo eventos, cumpleaños... el local tiene dos plantas y en la de abajo se pueden realizar sin problema», señala. Normalmente abierto tanto para el horario de comida como para el de cena, Brook Steakburguer cuenta con un menú diario, de 13.00 a 15.45 horas, en el que se incluye un entrante, un plato principal, una bebida y un postre por 11.50 euros.

Su carta –adaptada también a celíacos– es sencilla, con clásicos desde su apertura y novedades que van rotando en función de la temporada. Aunque, por encima de todo, lo que triunfa es la hamburguesa. En estos locales cuentan con hasta 14 diferentes. Desde las más clásicas, como la Bacon&Cheese o Clasicc Brook, hasta la Honey Mustard Chicken o la Cheesy Maddison, «una nuestras estrellas». «Para caerse de espaldas», se puede leer en su carta, que contiene cebolla caramelizada, queso de cabra o azul, salsa de arándanos, base de canónigos y carne cien por cien vacuno.

«Es momento de ser profundamente americano», se puede leer en uno de sus lemas. Pues eso, América un poco más cerca.