Amistad, deudas y venganza en Urueña

Óscar Fraile
-

'Astillas en la piel', la última novela de César Pérez Gellida, estará ambientada en el municipio vallisoletano y aborda el reencuentro de dos amigos de la infancia para solucionar cuentas pendientes

El escritor César Pérez Gellida. - Foto: Jonathan Tajes

Dicen las crónicas antiguas que, en el siglo XII, el rey Sancho III encarceló en las murallas de Urueña al conde Pedro Vélez y ordenó que se le amputara un miembro cada cuatro meses tras descubrirse que había tenido un romance con su prima. Una leyenda negra que guarda similitud con la nueva novela del escritor vallisoletano César Pérez Gellida, Astillas en la piel, que saldrá a la venta el 9 de septiembre. Y no porque la historia tenga nada que ver con la del libro, sino porque este thriller psicológico se desarrolla en el municipio vallisoletano y tiene en la venganza uno de los elementos centrales.

Mateo y Álvaro, dos amigos  de la infancia, se encontrarán en este pueblo para solucionar unas cuentas pendientes que no parecen tener solución, aunque uno de ellos esté convencido de tener la fórmula. «Ambos tienen un pasado que les ha afectado de forma distinta y que influye en el presente de una forma bastante dramática», anticipa el autor. De ahí que el título haga referencia a esas heridas del pasado o astillas en la piel que no siempre conviene sacar, por eso de que a veces es peor el remedio que la enfermedad.

Aunque Pérez Gellida vuelva a manejar los más bajos instintos del ser humano para construir la historia, su nueva obra tiene poco que ver con las anteriores desde el punto de vista estructural y argumental. De entrada, la nutrida nómina de personajes de otras de sus novelas se queda ahora reducida a los dos protagonistas. Lo mismo sucede con los escenarios. Todo transcurre en Urueña, salvo los saltos temporales que Gellida da a la infancia de Mateo y Álvaro, cuando ambos estaban en un internado de la madrileña Sierra de Guadarrama. La oscuridad y el duro frío castellano, con su cencellada por bandera, también tendrán mucho peso en la ambientación.

Lo que no cambiará es el «honesto» juego que Gellida mantiene con sus lectores, a los que siempre muestra un camino que no tiene por qué ser el más corto para conocer lo que va a pasar: «Me gusta jugar en igualdad de condiciones con ellos, por lo tanto, no hay artificios ni conejos que salen de la chistera, ya que tienes la posibilidad de anticiparse a los acontecimientos si eres un ávido lector; si no, te las vas a comer todas».

No es una empresa fácil para él, si se tiene en cuenta que sus fieles seguidores ya tienen el bagaje de sus once novelas previas. «Cada día es más complicado construir un argumento sólido, inédito y que no deje un sabor de boca al lector de que me estoy repitiendo», añade. Dice el escritor  que su última historia no es apta para corazones débiles, como si las anteriores lo fueran, y promete una vuelta de tuerca para llevar a los lectores a lo que denomina «Gellidismo extremo». Abrochen sus cinturones.

Blacklladolid recibe casi 3.000 solicitudes de asistencia

El castillo del Fuensaldaña acogerá del 23 al 26 de septiembre la primera edición de Blacklladolid, un certamen «de literatura y crimen» impulsado por la Diputación de Valladolid y diseñado por el propio Pérez Gellida. Serán cuatro días de encuentros con autores como Elísabet Benavent, Manuel Marlasca, Juan Gómez-Jurado, Paz Velasco, María Dueñas, Pedro Baños, Javier Sierra, Víctor del Árbol, Belén Ruano y Dolores Redondo, quien hará las veces de madrina de honor en esta primera edición. No ha sido fácil organizar esta cita, con la incertidumbre que impone la pandemia, sobre todo en aspectos como los aforos. Pero, pese a estos problemas, la demanda de asistentes ha estado muy por encima de lo previsto. Cuando hace un mes y medio se abrió el plazo de solicitudes, en solo tres horas se recibieron más de 600, pese a que solo hay sitio para 94. Desde entonces y hasta ahora ya hay casi 3.000 interesados en asistir presencialmente. No será posible, aunque todos podrán seguir el certamen vía streaming.

La cita también contará con la participación de clubes de lectura y prevé actividades que van más allá de los encuentros entre lectores y autores, si bien todavía no se han podido confirmar por aspectos relacionados con el protocolo covid.

Blacklladolid nace con vocación de continuidad. En esta primera edición el crimen, además de la literatura, será el eje central, pero Pérez Gellida avanza que en los próximos años se podría abordar la relación que tienen las letras con otros temas, como el vino, el sexo... «o todo aquello que pueda maridar bien con la literatura».