Y ya van doce

D.V.
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El Carramimbre CBC Valladolid arrasa en el tercer periodo al Iberojet Palma para sellar cómodamente un triunfo fraguado en la defensa. Óscar Alvarado (20 de valoración) y Mike Torres (18 puntos), los más destacados en la duodécima victoria por 75-65

Y ya van doce

Tres triunfos en Pisuerga en un 2019 tremendo para el Carramimbre. Con esta victoria, la duodécima, las ardillas se consolidan en la zona noble de la LEB Oro y vencen por segunda vez a un Iberojet Palma llamado a ser un rival directo por los playoffs.

Minutos antes de que se lanzase el balón al aire, Paco García fue homenajeado por superar la centena de partidos dirigiendo al Carramimbre CBCV y afrontaba, ante Iberojet Palma, el número 102 en su cuenta particular. Su sello, sin embargo, no se reflejó en los suyos en los compases iniciales. La defensa de los locales estuvo lejos de su mejor nivel y las primeras posesiones de ambos conjuntos se saldaron con un intercambio de golpes que plasmó la igualdad que se iba a vivir. A las ardillas, no obstante, se le atragantó el aro rival llegado el ecuador, todo lo contrario que a los baleares, que empezaron a sumar con facilidad y cerraron el primer periodo con un severo parcial de 2-14 en cuatro minutos (19-26), según informa CBC Valladolid.

Un triple del talentoso Kristaps Gluditis despidió el cuarto inaugural y otro abrió el segundo, lo que colocó a Iberojet Palma con máxima de diez puntos (19-29). El Carramimbre, con la segunda unidad en cancha, sufría para echar a Fran Guerra de la pintura (16 puntos sin fallo al descanso) y los problemas de faltas en los interiores carmesí no tardaron en llegar; con Bradley Hayes y Seydou Aboubacar en el banquillo, los visitantes siguieron sacando rédito de la superioridad en la pintura y solamente Mike Torres respondió.

Siete puntos con la firma del base barcelonés redujeron las diferencias, aunque los insulares siempre se mantuvieron por encima. Un parcial de 6-0, sin embargo, apretó las tornas y obligó a Félix Alonso a solicitar un tiempo muerto para no echar por tierra su ventaja (34-38). Ningún entrenador quería ceder ni un ápice, pero fueron los baleares quienes se estiraron de nuevo y llegaron al descanso manteniendo el botín cosechado en el primer periodo (35-42).

Vendaval y remontada en dos minutos

Durante el descanso el Carramimbre se transformó en un auténtico vendaval que arrasó con todo en la reanudación. En apenas dos minutos de auténtico frenesí, los vallisoletanos remontaron su desventaja merced a un parcial de 12-0 que rompió Fran Guerra (47-44). Sin embargo, ni la canasta del colosal pívot canario ni el tiempo muerto de Félix Alonso frenaron la fuerza de un huracán, el carmesí, que se colocó con una buena ventaja (57-44) tras una fuerte racha que llegó a ser de 22-2 en cuatro minutos. Auténtico vendaval con Alvarado, Reyes y Kazadi como estiletes.

No capeó el temporal para un Iberojet Palma a merced de las ardillas durante unos cuantos minutos, hasta que volvió a aparecer la puntería de un Kristaps Gluditis. Dos triples del exterior letón reanimaron a los insulares, pero la reacción no fue suficiente para detener la inercia positiva de los pupilos de Paco García, quienes afrontaron los últimos diez minutos con una buena ventaja (63-55).

La guerra de desgaste propuesta por Paco García había surtido efecto y el esfuerzo pesó demasiado para un Iberojet Palma que sufría cada vez más con el paso de los minutos. Mike Torres, que estaba cuajando una gran actuación, prácticamente sentenció el encuentro con tres robos consecutivos culminados con tres bandejas fáciles al contraataque. La buena labor del barcelonés (18 puntos), amén del clínic defensivo coral, dotó al Carramimbre de una importante ventaja a falta de solo tres minutos (76-64). Los insulares no tuvieron tiempo y la inercia ganadora de las ardillas hizo el resto para sellar un triunfo (80-76), el duodécimo, en el que se sufrió más de lo necesario y se vio empañado por la inoportuna lesión de Jubril Adekoya en la recta final.