Un hombre kurdo sirio de unos 30 años de edad se ha prendido fuego este miércoles por la mañana frente a la sede del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Ginebra y ha sido rápidamente evacuado en helicóptero a un hospital para recibir tratamiento por las quemaduras sufridas, ha informado la Policía.
El hombre, que vive en Alemania, ha sido evacuado en helicóptero a una unidad especializada en quemaduras del hospital universitario de Lausana, donde ha quedado ingresado, según ha explicado el portavoz de la Policía de Ginebra, Silvain Guillaume-Gentil. "Dado su estado, ha sido imposible hablar con él sobre sus motivos pero imaginamos que es por la situación política", ha señalado.
El 9 de octubre, las Fuerzas Armadas turcas pusieron en marcha la operación Manantial de Paz, con la que pretenden expulsar del noreste de Siria a los milicianos de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), lideradas por los combatientes kurdos sirios de las Unidades de Protección Popular (YPG).
Rusia y Turquía llegaron a un acuerdo el 22 de octubre por el que los milicianos de las YPG se retirarán de la zona fijada por Turquía, que pasará a estar controlada por fuerzas del régimen sirio y policías militares rusos.
"Estamos tristes e impactos por un incidente de inmolación que ha sucedido frente a la sede de Ginebra esta mañana", ha afirmado Andrej Mahecic, portavoz de ACNUR. El hombre se ha prendido fuego y ha intentado entrar en la sede de ACNUR pero los agentes de seguridad y el personal médico ha intervenido y ha apagado las llamas. "Confíamos en que se recupere", ha dicho Mahecic.
La sede de ACNUR está situada en una calle en la que también está ubicado un albergue para solicitantes de asilo, incluidos kurdos sirios.
"He visto las llamas y a los agentes de seguridad del edificio salir. En unos minutos ha llegado la Policía y una ambulancia. Allí (en el centro de solicitantes de asilo) hay sirios pero no puedo confirmar que sea uno de los alojados", ha explicado a Reuters un trabajador del centro de acogida. Un testigo de los hechos ha dicho que el hombre parecía "una enorme llama humana". "Dudo que pueda sobrevivir", ha apuntado.