“Ni todo es blanco, ni todo es negro, ni nadie tiene el 100 por 100 de la culpa, ni nadie está exento de ella”, afirmó hoy la vicesecretaria general del PSOE de Castilla y León, Virginia Barcones, ante la falta de acuerdo entre los partidos y la previsible convocatoria de unas nuevas elecciones generales el 10 de noviembre.
Barcones, que acudió en Soria a la inauguración de la exposición 'Museo Numantino. Cien años 1919-2019', insistió en que los socialistas no querían que se tuvieran que celebra de nuevo los comicios, después de que en abril fueran los “clarísimos ganadores” y remarcó que su objetivo era la conformación de un gobierno de “progreso” que permitiera al país seguir avanzando.
“Los socialistas hemos hecho todo lo posible para conformar un gobierno”, dijo Virginia Barcones, pero con la premisa de que fuera “estable”, “fuerte” y que pusiera rumbo al futuro y al progreso del país. En esto, añadió, tienen “mucho” que explicar Podemos, por negar por cuarta vez la conformación de un gobierno progresista y PP y Ciudadanos, a los que acusó de no tener altura de miras y Estado, para evitar que el Ejecutivo se apoyara en las fuerzas independentistas.
“No queríamos un gobierno a cualquier precio”, repitió Virginia Barcones, quien defendió que su partido ha sabido anteponer a sus intereses el Estado y los españoles. Por ello, “con toda la humildad”, aseguró que le vuelven a pedir a los ciudadanos su apoyo y para que confíen en la misma opción que lo hicieron en abril.
“El PSOE siempre va a anteponer España a cualquier otra circunstancia”, dijo Virginia Barcones puesto que de lo contrario habría un gobierno como el formado por PP y Ciudadanos en Castilla y León, que calificó un ejecutivo de la “rapiña”, puesto que aseguró que se basa en el reparto de sillas y no tiene proyectos “claros”, “estables” y “fuertes” que sean capaces de cumplir con las necesidades.
Finalmente, Virginia Barcones señaló que los socialistas tienen la conciencia “tranquila” y señaló que el gabinete bipartito de PP y Cs en Castilla y León es un “desastre”. “Hay que anteponer el interés general al personal o de partido”, dijo para concluir que afrontan desde ahora el reto de volver a ganar la confianza de los ciudadanos de la Comunidad.