El Barcelona ganó al Levante UD en el Camp Nou, en la vuelta de los octavos de final de la Copa del Rey, para remontar el 2-1 adverso de la ida y ganarse el billete para los cuartos de final, con doblete de Ousmane Dembélé, si bien el ‘caso Chumi’ y la posible alineación indebida en la ida podría cambiar este cruce en los tribunales. 

El combinado culé disputó una gran primera parte, de las mejores de la temporada. Desde el inicio se volcó en la presión, creando multitud de ocasiones. El marcador, sin embargo, no se movió hasta el minuto 30, cuando Dembéle se benefició de un rebote para abrir la lata. Cabaca intentó arrebatarle el balón al ‘Mosquito’, pero la pelota golpeó al francés, convirtiendo el despeje en un globo que acabó en la portería rival. Apenas unos segundos después, la fortuna volvió a aliarse con Dembélé, que no remató bien en un mano a mano, pero Aitor Fernández desvió el balón lo justo para que el 2-0 subiera al luminoso. El Camp Nou volvió a cantar La Marsella, rendidos a su futbolista, que se ha ganado el perdón de la afición gracias a sus goles. 

El Levante tenía que hacer un gol para igualar la eliminatoria al descanso, pero Messi en el minuto 54 evitaba cualquier atisbo de prórroga. A partir de ahí, el cuadro culé, a medio gas, no sufrió para retener la ventaja que se ganó en el césped. No dio opción al rival, que empezó serio en defensa, bien metido atrás, pero que se fue quedando sin fuelle a medida que pasaban los minutos.

Ahora la escuadra valenciana se aferra a la Justicia, pero el Barcelona asegura que su actuación está dentro de la legalidad y por eso confía en estar en el bombo del sorteo que se celebra hoy.